Los 10 errores más frecuentes que se cometen al intentar bajar de peso

Estar en sobrepeso o tener obesidad a unos les preocupa, mientras que a otros les “enorgullece” mostrar una figura fuera de los cánones de belleza convencionales. Sin embargo, hay que tener en cuenta que ambos estados no se limitan a la apariencia, sino que son un asunto de salud física y mental.

Estresarse por esto podría ser el primer error que se cometa en contra del bienestar, pero hay que tener presente que tener un peso por encima de lo que la edad, el sexo y la estatura indican puede desencadenar en patologías más serias como la hipertensión y la diabetes; pero además está asociada a “11 tipos de cáncer y a disminuir 10 años más la probabilidad de vida que una persona de peso normal”, dice el doctor Richard Marine.

Mantener un peso en el rango adecuado significa salud. Si eres de los que siempre estás incluyendo entre tus metas perder las libras de más deberías conocer estos 10 errores frecuentes que se cometen a la hora de querer lograrlo:

1. Ponerse la palabra dieta entre ceja y ceja. Para la doctora Natalia Montero, especialista en psiquiatría, actualmente se investigan teorías que indican que las personas con sobrepeso experimentan baja autoestima, razón por la que pueden volverse ansiosos, lo que en muchas ocasiones altera la ingesta de alimentos. Lo ideal es cambiar los hábitos para convertirlos en un estilo de vida saludable; es decir comer de manera equilibrada y hacer ejercicio.

2. Buscar resultados rápidos. La nutrióloga Erika Pérez dice que éste es el más frecuente de todos, desde el punto de vista clínico la pérdida de peso saludable no supera las 2 o 3 libras semanales.

3. Buscar dietas milagrosas. La doctora Pérez explica que actualmente hay más de 30 patrones dietéticos que van desde la dieta del jugo verde hasta la militar. “No hay un patrón específico ni una dieta ideal, pero sí recomendaciones de cambio de hábitos alimenticios”.

4. No incluir los ejercicios. El gran enemigo de la salud de hoy es el sedentarismo extremo. Hay que tener presente que comemos para alimentarnos, pero también esto incluye un gasto de energía que debe producirse de manera natural o programada a través de los ejercicios. “Quien no combine una buena alimentación con ejercicio estará llevando un plan incompleto donde no habrá una pérdida de grasa. Hay pacientes delgadas que son obesas enmascaradas porque tienen más grasa que masa muscular”, explica Erika Pérez.

5. Copiar indicaciones. Según la nutricionista Susana Kury, es habitual que las personas en busca de disminuir peso le digan a otras a las que han visto resultados positivos “dame la dieta que tú hiciste”. Ella lo califica como un gravísimo error porque cada organismo es diferente, como lo es el estilo de vida de cada cual. Quizá nunca veas resultado haciendo regímenes alimenticios indicados a otros.

6. Tomarse los fines de semana. Comer equilibrado de lunes a viernes para los fines de semana dar rienda suelta a tus deseos es un error porque se requiere de una coherencia; la forma correcta consiste en aprender a comer, en cuanto a tipo de alimentos y las porciones de estos, considera Kury.

7. Consumir bebidas alcohólicas. Seguro que has oído sobre “la barriga por cerveza”, pero no solo ella te hace aumentar de peso, sino cualquier bebida alcohólica. Lo que explica Susana Kury es que el alcohol desinhibe y se come lo que sea para lograr componerse nuevamente; si se tiene resaca se apoya en comidas altas en calorías para quitarla, entre otros tantos efectos negativos.

8. No tomar agua. Si no lo haces el metabolismo funcionará más lento y la persona sentirá más hambre porque se puede confundir la sed con el hambre, conduciéndose a comer más, comenta Kury.

9. No contar lo que sí cuenta. De ahí surge la frase ‘engordo hasta de beber agua’, pues no para el doctor Richard Marine, lo que te engorda es la mentica, el chocolatico, el cafecito y la galletita, que te pueden agregar hasta 600 calorías a lo que sí contaste como comida.

10. Excluir grupos alimenticios. El especialista Marine dice que dentro de un estilo equilibrado es necesario consumir un 25 a 30% de proteínas; un 50 o 60% de carbohidratos; y un 15 a un 20% de grasa, excluir alguno totalmente es un error.