Puerto Rico, bajo la presión de los acreedores por no pagar la deuda

Un hombre cruza una calle de adoquines en el distrito colonial de Viejo San Juan, en Puerto Rico, el domingo 2 de agosto de 2015. (AP/Ricardo Arduengo)

SAN JUAN. Los fondos de inversión Oppenheimer y Franklin Advisers reclamaron al Gobierno de Puerto Rico que cumpla con sus compromisos, tras el primer impago de una de las endeudadas corporaciones públicas de la isla, confirmaron hoy a Efe fuentes de la Liga puertorriqueña de Cooperativas, otro de los acreedores.

William Ortiz Negrón, presidente de la Junta de Directores de la Liga, indicó que ambos fondos remitieron una carta conjunta a la Corporación para el Financiamiento Público (PFC, en inglés), una subsidiaria de Banco Gubernamental de Fomento (BGF) que este fin de semana no cumplió con uno de los vencimientos de su deuda.

Las corporaciones publicas puertorriqueñas arrastran una deuda de 73.000 millones de dólares que el Gobierno de la isla ya ha advertido de que se no podrá pagar en las condiciones fijadas.

Según Ortiz Negrón, las cooperativas financieras de la isla, afectadas en 4 millones de dólares por el impago, han mantenido contactos con representantes del Ejecutivo para que se salde lo adeudado, además de estudiar posibles medidas legales en el caso de que no se alcance un acuerdo.

La carta de Oppenheimer y Franklin Advisers, dirigida también a la presidenta del BGF, Melba Acosta, destaca que el impago afectará a los inversores de esos dos fondos, particulares y cooperativas financieras de Puerto Rico.

En su carta los fondos señalan que, además del perjuicio financiero para quiénes depositaron su confianza en una corporación pública de Puerto Rico, el camino elegido por el Gobierno dirige a la isla caribeña “hacia el litigio y a deteriorar más la confianza de los mercados de capitales” en el Estado Libre Asociado.

La misiva subraya que la decisión del Ejecutivo de Alejandro García Padilla viola la ley de Puerto Rico, que a través de su Constitución obliga al pago a los acreedores.

Se matiza que a diferencia de lo que apunta el Gobierno de que era necesario contar con la aprobación de las cámaras legislativas para aprobar una partida que cubriera el pago a los acreedores del PFC, el secretario de la Hacienda de Puerto Rico está facultado para ordenar ese pago sin necesidad de cualquier autorización, de acuerdo a la ley 164 de 2001.

Oppenheimer y Franklin Advisers mostraron su sorpresa porque se haya decidido no pagar a unos fondos que han ayudado al desarrollo de Puerto Rico durante las últimas tres décadas sin ni siquiera negociar un plan de reestructuración.

Ortiz Negrón resaltó que aunque no descarta ninguna medida están en marcha contactos con el Gobierno con la esperanza de que se cumpla en el futuro con los pagos establecidos.

Dijo que, de momento, se mantiene la serenidad a pesar de que las cooperativas financieras puertorriqueñas tienen en sus carteras de inversión cerca 1.100 millones de dólares en deuda de las corporaciones estatales de Puerto Rico que vencen en plazos que se cumplen durante los próximos cuarenta años.

La presidenta del BGF dijo en declaraciones a un medio local que el hecho de que no se pagara en la fecha acordada el vencimiento de la PFC no quiere decir que no se vaya a pagar en el futuro y que el Gobierno no tiene todavía listo -se espera que esté concluido al final del presente mes- el plan de reestructuración de una deuda que se eleva a 73.000 millones de dólares.

Recordó que se trabaja para mejorar la liquidez del BGF, a pesar del desembolso de 169 millones de dólares efectuado hace una semana para cumplir con vencimientos de deuda inmediatos.