Estudio determina hay preferencia por el pan de agua y distorsión en precios
ProCompetencia divulga los resultados de un análisis que busca examinar la situación
SANTO DOMINGO. Un estudio concluyó que un porcentaje significativo de panaderías en el país utiliza agua directamente del sistema pluvial para la producción de sus panes y que, en cuanto a la comercialización, se presume que existe intercambio de información sobre variables sensibles que distorsionan los precios, las cantidades de producción, el tamaño, la calidad y la innovación.
“En este sentido, se genera un impacto negativo sobre el bienestar del consumidor, mediante precios más altos a los que existirían en un mercado de libre competencia, teniendo como consecuencia un mercado que opera de manera ineficiente”, indica el análisis.
El estudio, realizado por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (ProCompetencia) y dado a conocer recientemente, concluyó que el 1.13 % del gasto de los hogares dominicanos se destina al consumo de pan, y los tipos de agua y sobado se ingieren más mientras más baja es la canasta familiar.
Además, que el 70 % de los encuestados prefiere el pan de agua sobre el pan sobado por tener mejor sabor, ser más fresco, satisfacer más, ser crujiente y tostado. Como sustituto de ambos, asumen los víveres, especialmente el plátano.
ProCompetencia explica que el pan sobado es el obtenido mediante el uso de cilindros refinadores y el de agua es el resultado de un proceso en el que usualmente no se refina con cilindros y está prohibido el empleo de materia colorante, uso de grasas y el empleo de azúcares es limitado.
El estudio calcula que el precio promedio de venta del pan varía conforme el canal de comercialización. Indica que en los hipermercados la unidad de pan de agua y pan sobado se vende en promedio a RD$4.69 y RD$5.73, respectivamente. Los supermercados tienen un precio de RD$4.61 para el de agua y de RD$5.26 para el sobado.
En los colmados el de agua y sobado se venden a RD$5.01 y RD$4.99, respectivamente. Finalmente, en las panaderías y/o reposterías el precio por unidad de pan de agua es de RD$4.92 y de pan sobado es de RD$4.85.
Al evaluar el precio de la harina desde enero de 2014 hasta octubre de 2016, para presentaciones en sacos de 120 libras, la investigación destaca que durante ese período esta solo ha tenido un alza de 9.70 % para la de pan de agua, y 7.87 % para la de pan sobado, y que los precios a partir de septiembre del 2014 se han mantenido estables en este insumo.
Para la evaluación, titulada “Estudio económico sobre las condiciones de competencia del mercado del pan en la República Dominicana”, se encuestaron 187 panaderías del norte, sureste y suroeste del país, y se entrevistaron a 101 consumidores y 94 colmados.
Se señala que el mercado mundial de panaderías se valoró en US$461,000 millones en 2016, según los datos de la IBISWorld. Este está integrado en 91 % por panaderías familiares o artesanales, supermercados y tiendas de abarrotes, sumando 277,000 empresas.
De los encuestados, en cuanto a las marcas de agua empleadas, los datos muestran que el 40.46 % utiliza el agua directamente del sistema pluvial, seguido de una marca específica del mercado, con 8.09 %, 5.20 % la utiliza de un filtro propio y el restante 46.24 % de diversas marcas.
El informe técnico final del estudio indica que los datos evidenciaron que si el precio del pan de agua experimenta un aumento de entre 5 %-10 % de manera no transitoria, el 19.8 % de los consumidores continuaría consumiéndolo, y el 34.7 % lo sustituiría por productos como el plátano, los guineítos o la yuca.
En caso de que el precio del pan sobado sea el que experimente el aumento, el 28.71 % prefiere seguir consumiéndolo, mientras que el 28.7 % lo sustituiría por plátano, guineíto o yuca.
Con relación a los puntos de ventas del pan, el 49.5% de los consumidores encuestados lo compra en colmados, 29.7 % en las panaderías y 7.9 % en los supermercados.
El precio y el mercado
El valor de la producción de alimentos de panadería representó 2.19 % del Producto Interno Bruto (PIB) de la República Dominicana para el 2015, indica el análisis.
“Existe la percepción de que el precio de estos productos constituye una especie de precio regulado a nivel nacional por los mismos agentes oferentes de este producto, los cuales a nivel nacional están asociados en la Unión de Medianos y Pequeños Industriales de la Harina (UMPIH)”, destaca el informe.
Agrega que “se presume que existe intercambio de información sobre variables sensibles que reducen la rivalidad entre los agentes económicos competidores de este mercado”. “Esto pudiera generar un impacto negativo en el bienestar del consumidor, ya que este comportamiento tiende a distorsionar los precios del pan, las cantidades de producción, la correcta asignación de factores de producción, el tamaño, la calidad e innovación del producto”.
Se observa que el impacto en el excedente del consumidor del pan de agua y sobado es negativo, debido a diversas razones que inciden en su disminución, “a saber: el aumento de precios que genera una pérdida del bienestar al tener que pagar más dinero por el mismo bien”.
“El daño principal es que los consumidores se ven obligados a comprar a un precio más alto y/o una menor cantidad del producto, o se ven forzados a dejar de adquirir esos bienes. Estas acciones afectan sustancialmente a la población de menor estrato social”, indica la investigación.