Un Licey épico deja al Escogido en el terreno y sube a la segunda posición

El domingo en el Quisqueya, en el día dedicado a Fernando José Ravelo, arquitecto de cuatro coronas nacionales y dos Series del Caribe, Arismendy Alcántara disparó tres imparables, incluyendo el decisivo al cierre del noveno para los Tigres dejar en el terreno a al Escogido por 3-2.

Fue el sexto triunfo al hilo para los añiles (12-11), aunque los Leones (16-8) siguen en la punta. El triunfo, combinado con el revés de los Toros ante las Estrellas, provocó un empate en la segunda posición entre los azules y los taurinos.

El cubano Vladimir Gutiérrez lanzó seis entradas de solo tres hits, una vuelta, dos bases y cinco ponches, aunque el triunfo fue para Jairo Asencio (1-0), que desperdició su primera oportunidad de salvar. Perdió José de Paula (1-2).

Los azules se adelantaron en el marcador en la segunda entrada cuando Jorge Bonifacio abrió con doble al jardín izquierdo, Alcántara lo movió hasta la antesala con hit al derecho para desde allí anotar con rola por el campo corto de Welington Castillo.

Los rojos igualaron en el cuarto con cuadrangular abriendo el episodio de Aderlin Rodríguez.

Los añiles recuperaron la ventaja en el séptimo. Bonifacio se embasó al sacar rodado a primera que Aderlin Rodríguez no pudo manejar, Alcántara lo movió a la segunda con hit por el lanzador y Castillo se sacrificó para colocar hombres en posición de anotar. Henry Martínez fue sustituido en el montículo por José Rafael “Jumbo” Díaz, a quien Nick Heath le sacó elevado de sacrificio productor al central para el 2-1.

Pero en el noveno escarlata, Daniel Johnson abrió la entrada con jonrón solitario por el derecho contra Jairo Asencio para volver a igualar la pizarra.

Sin embargo, en la última oportunidad añil antes de irse a entradas extras, Bonifacio sacó elevado al izquierdo que Josh Naylor dejó escapar y llegó hasta la tercera base para luego anotar con el hit ganador, al derecho, Alcántara.

El homenaje a Ravelo

La sorpresa fue total. Y como tal, se tornó en uno de los reconocimientos más emotivos de los que ha ofrecido a uno de sus personajes el Club Atlético Licey.

Cuando Fernando José Ravelo Jana vio su nombre en la gran pantalla situada sobre el paredón de los 411 del jardín central y de repente rodeado de su esposa, hijos, un nieto, hermanos, primos, sobrios, cuñadas... las lágrimas no tardaron en brotar, mientras recibía abrazos, apretones de mano y besos que embargaron de emotividad, no solo a él, también a muchos que le rodearon.

Era el momento de reconocer al gran ser humano que por 12 años, a partir de 2000-2001, fuera gerente general de los Tigres del Licey y quien lo guío a inéditas siete series finales consecutivas, de los que resultaron cuatro títulos nacionales y dos de la Serie del Caribe.

A Fernand, apelativo cariñoso con que siempre se le ha nombrado en 40 años de presencia en la franquicia azul, se le mantuvo en secreto que sería objeto de un homenaje, que consistió en la entrega de dos enmarcados: uno con varias fotos de sus mejores momentos en el equipo; el otro, una camiseta con el número 22, que simboliza la cantidad de títulos ganados por el Glorioso.

Ravelo, que regresó esta temporada 2019-20 al rol de comentarista de televisión de la Cadena Azul -adjunto a su cargo de director de Operaciones dentro de la Gerencia General-, el coordinador de transmisión Ildefonso Ureña le dijo que compartiría la antesala el Rafael Díaz.

Con total inocencia y la bonhomía que le caracteriza, asumió el mandato y compartió la antesala, hasta que Díaz, sin hacerlo sospechar, anunció un homenaje que comenzaría en la pantalla gigante. Ravelo no se enteró hasta que le hicieron girar su vista hacia ella, al tiempo, que sus seres queridos le rodearon.

En vídeo proyectado en la gran pantalla, Manny Martínez, Ronnie Belliard, D’Angelo Jiménez y Carlos Pérez hablaron de sus vivencias con su antiguo gerente general, mientras las felicitaciones se les agolpaban.

Desde antes de iniciar el emotivo homenaje, la dirección ejecutiva del Club Atlético Licey, encabezada por su presidente, doctor Domingo E. Pichardo Peña, pisaba el terreno frente al dogout del Licey, para hacer latente el objetivo. Le acompañaron los directivos, Ricardo Ravelo Jana (hermano del reconocido), Tancredo Aybar, Jaime Alsina, Miguel Ángel Fernández, Rafael Úbeda y el administrador de las oficinas Parmenio Rodríguez.

Rodeado de familiares y directivos, Fernand procedió a ejecutar el lance de honor, que recibió quien fuera su formidable capitán de equipo en parte de los 12 años en que fungió como gerente general el Glorioso Licey.