Sindicatos critican a China antes de Juegos de Invierno

Una coalición global de sindicatos se unió a la larga lista de defensores de los derechos humanos que cuestionan que China sea sede de los Juegos Olímpicos de Invierno 2022 y apuntó al Comité Olímpico Internacional por dar su consentimiento en lo que asegura es un genocidio y crímenes contra la humanidad que se han reportado en el país sede.

La Confederación Sindical Internacional (CSI), con sede en Bélgica, publicó el martes su reporte “China: medallista de oro en represión”, destacando las violaciones a derechos humanos. Indicó que enviaron una copia al presidente del COI Thomas Bach.

Los supuestos abusos incluyen: trabajo forzado, encarcelamiento a sindicalistas y defensores de la democracia en Hong Kong, intimidación a la comunidad LGBTI del país y represión a minorías étnicas y religiosas con el pretexto de “anti-independentismo y la lucha contra el terrorismo”.

“Queremos que el COI intervenga con una serie de principios básicos sobre derechos humanos”, dijo a The Associated Press Sharan Burrow, la secretaria general de la ITUC en una entrevista.

“Queremos que los gobiernos asuman una posición en defensa de la seguridad de sus propios atletas y queremos que los patrocinadores realmente evalúen su vínculos con los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing”, agregó. “Tienen a grandes empresas, que están apoyando estos Juegos que realmente deberían de estar a la altura de los valores que ellos dicen respetan y que es un derecho humano fundamental”.

Algunos de los patrocinadores más importantes y que colectivamente pagan miles de millones de dólares al COI, incluyen a compañías de renombre como Coca-Cola, Airbnb, Visa, Toyota, Alibaba, y Procter & Gamble.

El reporte del CSI fue publicado apenas tres meses antes de la inauguración de la cita invernal, el 4 de febrero. Han habido peticiones de boicot dirigidas a patrocinadores y las cadenas de televisión, así como exigirle al COI que no realice los Juegos en China. Algunos manifestantes fueron detenidos durante la ceremonia de encendido del pebetero el mes pasado en Grecia.