La reina de las pesas deja de cargar pesado luego de 16 años en la selección

Dueña de récords centro-caribeños y Panamericanos Se quedó a dos kilogramos de una medalla olímpica

Yuderqui Contreras en su competencia en los Panamericanos de 2011.

En el mismo lugar en que ella comenzó su senda triunfal como arrolladora, allí dijo adiós a la halterofilia, Yuderqui Contreras, la más excelsa de las pesas femenina, quien luego de 16 años decide bajarse de la plataforma.

Si hay dudas sobre su excelsa carrera quedan respondidas con este breve detalle: Dos de oro y una de plata en Juegos Centroamericanos y del Caribe consecutivos; una plata y dos oros en Juegos Panamericanos consecutivos y los récords de esas dos regiones, además de cuarta en los Juegos Olímpicos de 2008. Todo eso en su división de los 53 kilogramos para ser la reina de las pesas de esa división.

En el 2003, con tan sólo 17 años y apenas unos seis meses en las pesas, Contreras comenzó a sorprender al conquistar una resonante medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Santo Domingo, ese año. Su sonrisa comenzó a deslumbrar desde entonces.

Y esta semana justamente anunció su despedida, luego de conquistar la presea de oro en el campeonato de pesas de los Juegos Deportivos Militares. Su anuncio formal será el 12 de junio en el Comité Olímpico Dominicano. Por tanto no irá a los Juegos de Lima 2019. La nativa del sector La Caoba (San Pedro de Macorís) comenzó en una competencia continental, un peldaño muy elevado para su edad. El paso de casi dos décadas, la dejó como la atleta más ilustre no sólo de las pesas, sino de cualquer atleta femenina.

El adiós

El cuerpo de Yuderqui dejó de responder de forma acostumbrada. Falló, en abril, en el Panamericano de pesas, en Guatemala y sus últimas presentaciones estaban lejos de su clase.

En grande

A ella sólo le faltó una medalla olímpica, con la que coqueteó en los Juegos de Pekín 2008, al ubicarse encuarto lugar. La medalla pudo pasar del sueño a la realidad, pero horas antes de subir a la plataforma fue perseguida para una prueba de sustancias controladas, lo que la obligó a tomar agua en exceso para orinar. Eso la llevó a subir al menos kilo y medio más y en consecuencia tuvo que abandonarse en el sauna por varias horas con el fin de conseguir el peso requerido para su división de los 53 kilogramos. Aún así quedó a dos kg de hacerse con el bronce, tras alzar 93 kg en arranque y 111 en envión para totalizar 204 kg, dos menos que la indonesa Raema Lisa Rumbewas (91+115/206). Con empatar, Yuderqui Maridalia hubiera ganado por peso corporal.

El proceso se convirtió en la parte más triste de su carrera, pues una prueba de dopaje, en esos Juegos, alegadamente fue positiva, pero la prueba B reafirmó la pureza y juego limpio de Yuderqui. El caso pudo derivar en demanda legal, pero labrar eso era otro asunto que por alguna razón quedó ahí.

Dueña de récords

Esta atleta “premium” llegó a quebrar sus propias marcas varias veces. Luego de una readecuación de las divisiones de pesas, ella terminó como la reina de los 53 kilogramos, categoría que fue movida a los 55 kilogramos. Antes de la reprogramación dejó unos kilos muy elevados con marca de 96+113 en Juegos Panamericanos, en este caso en los de Guadalajara 2011. Quebró los de Río 2007. Más elevado dejó el listón a nivel de Juegos Centroamericanos y del Caribe (97+117), marcas que también quedaron imborrables. En el 2011, en el Foro de Halterolia en Tlaquepaque, Guadalajara, después de la competencia la venezolana Inmara Henríquez lo dejó claro: “Si Yuderqui viene una sabe que viene a pelear por la plata”.

Su mayor disfrute

La presea que más la hace sentirse orgullosa fue su primera en un mundial. Ocurrió en Qatar al ganar bronce en 2005 con 211 kg. Luego logró plata en Antalya, Turquía con 93 kg en arranque. “¿Sabes lo que es coger una medalla mundial y aquí no valoran eso?”, comentó la haltera.

Momentos más tristes

En los Juegos Olímpicos de Londres 2012 por primera vez fue incapaz de pasar un intento, con el arranque de los 94 kilogramos, el cual falló tres veces y ahí se eliminó. Ese hecho, unido a su vinculación al dopaje en 2008 son las noches tristes de la laureada atleta.

¿Y ahora qué?

Estudiante de contabilidad en la Unphu, Yuderqui Maridalia es madre de Ian, su niño de un año y ocho meses. Tiene esas dos tareas por delante. Algo es seguro y es que se despide del deporte con una carrera de Grado A. En una conversación informal, en chanza, pero sin dejar de ser real, comentó: “Cada vez que competía yo rompía mi propio récord”.

Amante del deporte en todas sus dimensiones. Confía en que la base del deporte debe de ser desde la escuela. Ha cubierto Juegos Panamericanos y Juegos Centroamericanos y del Caribe.