Qatar depende de la desalinización

Qatar, anfitrión de la Copa Mundial de Fútbol, es una de las naciones del mundo con mayor dificultad para tener acceso a agua potable

ARCHIVO - Un rociador de agua en la corniche en Doha, Qatar, el miércoles 19 de octubre de 2022. (AP/Nariman El-Mofty)

Árida y rodeada por las aguas saladas del Golfo Pérsico, Qatar se encuentra entre las naciones del mundo con mayor dificultad para tener acceso a agua potable. El anfitrión de la Copa Mundial, con una población de 2,9 millones, no tiene ríos y recibe menos de cuatro pulgadas (10 centímetros) de lluvia por año como promedio.

Se trata de una condición que el rico emirato ha logrado sortear gastando gracias a una costosa tecnología conocida como desalinización y que permite que el agua del mar se pueda beber.

Al hacerlo, Qatar no está sola. Las monarquías de Bahréin, Kuwait, Omán, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos también carecen de agua fresca y dependen de la desalinización. Israel también lo hace. Pero la solución tiene un costo: remover la sal del agua de mar es un proceso caro, pues precisa de una demanda adicional de energía derivada de los combustibles fósiles.

Y también crea de un producto secundario, que al arrojarse al oceáno, puede afectar los ecosistemas marinos.

Una mirada al suministro de agua en el país y el rol de la desalinización.

¿QUÉ ES LA DESALINIZACIÓN?

Es el proceso de generar agua dulce. que los humanos puedan consumir, del agua de mar.

Las plantas desalinizadoras extraen el agua del óceano mediante enormes tuberías que luego pasan por una serie de membranas que permiten el paso de las moléculas de agua, pero que eliminan la sal. El proceso es conocido como ósmosis inversa.

¿DÓNDE SE USA?

Hay plantas de desalinización en litorales de todo el mundo, pero las de mayor capacidad se encuentran en los países del Medio Oriente — de altos ingresos y afectados por la falta de agua — como Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos e Israel. Arabia Saudí tiene la planta más grande del grupo.

La tecnología de ósmosis inversa empezó a usarse desde la década de los 50. Los países del Golfo Pérsico fueron los primeros en emplearla. Luego que la bonanza petrolera de los años 70 y 90 les transformaron en algunos de los países más ricos del mundial, empezaron a invertir ampliamente en la infraestructura. Israel se abocó seriamente a la desalinización a fines de los 90 tras una severa sequía.

Hay casi 16.000 plantas de desalinización alrededor del mundo, de acuerdo con investigadores del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo Humano. Aproximadamente la mitad del agua que producen está en Medio Oriente y el norte de África.

Qatar depende mucho del agua que se desaliniza del Golfo Pérsico. El agua a la que se le ha extraído la sal represente el 60% de su suministro total, y casi toda del consumo residencial, según datos del ente de planificación del país. El gobierno subsidia el agua para sus residentes. El agua subterránea conforma el otro cuarto del suministro del país y se emplea por las granjas. Se extrae con sistemas de bombeo mecanizados y se está agotando rápidamente.

¿CUÁLES SON LOS TEMORES AMBIENTALES?

Eliminar la sal del océano requiere de mucha energía. A menudo, la electricidad se genera quemando combustibles fósiles.

“Sencillamente la extracción de la sal del agua precisa de demasiada energía", dijo Peter Gleick, presidente emérito del Pacific Institute en California, que lleva décadas estudiando los recursos acuáticos.

El proceso se ha hecho más eficiente en décadas recientes. Pero igual requiere de entre 3,5 y 4,5 kilovatios hora de electricidad para desalinizar 264 galones (1.000 litros de agua), según un estudio de 2019 de la Universidad de Corea en más de 70 instalaciones de alta escala. Un refrigerador en Estado Unidos usa 4 kilovatios hora de electricidad por día.

El otro problema es el vertido de la salmuera, el agua con mayor concentración de sales tras la filtración. Algunas instalaciones la depositan en la tierra o lo inyectan subterráneamente. Pero la mayoría la devuelve al océano. Algunas la diluyen antes de hacerlo.

La salmuera suele tener metales pesados y químicos para el tratamiento del agua de mar. Su alto contenido de sal y temperatura pueda dañar las algas marinas, los arrecifes de coral y los hábitats de hierba marina. Arabia Saudí, los Emiratos, Kuwait y Qatar generan el 55% de salmuera por desalinización, según investigadores de la ONU.

¿Y EL AGUA EN EL MUNDIAL?

Qatar anticipa un incremento del 10% de su suministro de agua durante el Mundial, según un portavoz de Kahramaa, el servicio nacional de agua y electricidad. Significa que hará mayor uso de sus reservas de agua desalinizada y podría incluso aumentar el agua de mar que deberá filtrar cada día, dijo Amin Shaban, hidrólogo del Consejo Nacional de Investigación Científica del Líbano y experto sobre acueductos en Medio Oriente.

Esa agua se usará para los 1,2 millones de visitantes extranjeros y darle mantenimiento al césped de los estadios y canchas de entrenamiento.

El costo energético de la desalinización y que Qatar dependa tanto del mismo suscita interrogantes sobre las promesas de Qatar y la FIFA de que este Mundial no afectará al medio ambiente.

Las autoridades aseguran que los inodoros y las máquinas de limpieza de los ocho estadios mundialistas usarán agua reciclada. Pero los campos de fútbol, que los trabajadores llevan regando por meses — en medio del calor abrasador del verano — emplearán agua desalinizada.

“El impacto aumentará" durante el Mundial, dijo Mohammed Mahmoud, director de clima y agua en el Instituto del Medio Oriente, un centro de estudios. Añadió que el incremento no alcanzará el consumo de agua por parte del sector agrícola de Qatar. “No están ni cerca de la misma escala”.

___

Siga a Suman Naishadham en Twitter: @SumanNaishadham

___

La cobertura climática y medioambiental de Associated Press recibe apoyo de varias fundaciones privadas. AP es la única responsable de su contenido.

Noticias y servicios que extienden el alcance global de la cobertura basada en hechos