Víctor Robles relanza su carrera a su llegada a los Marineros de Seattle

El jardinero dominicano Víctor Robles, en un momento con una cotización por encima de la de Juan Soto en la organización de los Nacionales de Washington, específicamente en el año 2018, cuando el era considerado el mejor prospecto del equipo y quinto de todo el negocio, con Soto siendo el número dos, ha encontrado una nueva casa luego de ser deshauciado por el conjunto de la capital norteamericana.

Robles firmó un contrato de dos años y US$9.75 millones de dólares con los Marineros de Seattle, con una opción para el 2027 que le reportará US$9 millones, según un reporte de Jorge Castillo de ESPN. 

El dominicano tuvo un desastroso arranque con los Nacionales este año y fue dejado en libertad luego de colocar un .120 de promedio de bateo en 14 partidos.

Robles llegó a Seattle como un seguro de vida defensivo en medio de una lesión del estelar jardinero central dominicano, Julio Rodríguez, y ha aprovechado al máximo la oportunidad que le ha el dirigente Scott Servais, su línea ofensiva es .303/.372/.450 con tres cuadrangulares y ocho carreras empujadas en 42 partidos en los que se ha robado 12 bases y anotado 15, con siete dobles. 

Su defensa, como de costumbre ha estado superba y ha suplido a carta cabal la ausencia de J-Rod en la línea central de los Marineros. 

Rodríguez había estado fuera de la alineación de los Marineros desde el 22 de julio con una torcedura del tobillo derecho  y regresó este domingo para unirse a Robles y Randy Arozarena en unos jardines que pueden ser la envidia de cualquier dirigente por el atletisismo y la precisión defensiva que los tres  brindan. 

Hizo lo correcto 

Robles hizo lo correcto, aprovechó un gran momento para asegurar parte de su futuro a corto plazo firmando este contrato que lo ata a Seattle, por lo menos por dos años, un equipo que se ha convertido en una fuerza dominante en la división oeste de la Liga Americana, peleando la división con los Astros de Houston, con una de las mejor rotaciones abridoras del negocio. 

El hubiera podido esperar firmar un contrato luego de terminada la temporada, pero su historial de lesiones e inconsistencia en los aportes ofensivos, convirtieron este, en el mejor momento para firmar un contrato para él.