El COVID-19 activa las alertas en equipos de la Lidom

Los equipos torearon a un COVID-19 menos presente en la fase regular con un protocolo flexible de 20 pruebas aleatorias a la semana, pero el incremento de los casos en la última semana y la llegada de la contagiosa variante Ómicron parecen comenzar a ser factor.

Un escenario muy distinto al torneo pasado, cuando Licey y Gigantes tuvieron que paralizar su participación a causa de brotes.

Las Águilas, que solo sufrieron la baja por el virus de Robel García a principio de la campaña, confirmaron el martes la presencia de dos casos positivo entre cuatro jugadores sospechosos y han decido restringir el contacto con los jugadores, limitando el acceso al clubhouse al personal del equipo.

El lunes, el Licey apartó del grupo al dirigente José Offerman y al abridor del partido ante las Estrellas, Albert Abreu, hasta que el martes conociera los resultados de los exámenes, que arrojaron negativo. José Leger, coach de banca azul, hizo las veces de dirigente ante los verdes en el triunfo 8-3.

“Estamos exhortando a los muchachos a usar la mascarilla en el clubhouse, que no salgan a la calle a lugares cerrados, hemos restringido la entrada a la cueva a todo el mundo. Tenemos que protegernos más”, dijo Ángel Ovalles, gerente general del conjunto amarillo, en conversación con DL.

Las medidas se toman en una etapa donde hay que disputar 18 partidos en 24 días, una fase con el margen de error más estrecho y con menos brechas para reemplazar piezas.

El departamento de comunicación de las Águilas informó que a partir del martes regresan a la modalidad de Zoom para realizar las conferencias de prensa y entrevistas con los jugadores y directivos.

“Estamos siendo más estrictos en Licey con el protocolo de salud, por encima del existente de Salud Pública y Lidom”, dijo Audo Vicente, gerente del Licey al programa Grandes en los Deportes. César Cabral y Patrick Rutuolo también arrojaron negativo por los Tigres.

De momento, en las Águilas se ha descartado la opción de concentrar a los jugadores en una burbuja como en la temporada pasada.

Gigantes y Estrellas también han fortalecido las medidas con el objetivo de evitar bajas.

En Puerto Rico hubo que detener la liga este mes por 12 días debido a un rebrote del virus que ya alcanza los 5,4 millones de muertes en todo el planeta.