Vivanco cree que su detención en el AILA fue mensaje de "intimidación" y "abuso de poder"
El director de Human Rights Watch fue retenido por una supuesta confusión, según Migración
SANTO DOMINGO. El director de Human Rights Watch (Observatorio de Derechos Humanos) para las Américas, José Miguel Vivanco, consideró que su detención momentánea en el Aeropuerto Internacional de Las Américas (AILA) fue un mensaje "de intimidación" y un "abuso de poder", pero advirtió que va a insistir en denunciar "el despojo de la nacionalidad a miles de ciudadanos dominicanos".
El activista explicó que se disponía a abordar un avión rumbo a Miami cuando fue retenido en la oficina de migración durante más de dos horas, por lo que perdió ese vuelo y el siguiente.
Vivanco recuperó su pasaporte y se le permitió seguir su viaje. A las 10.12 de la mañana partió a Miami, según confirmó vía telefónica Celso Pérez, miembro del equipo de Human Rights Watch en esa ciudad.
Rubén Paulino, director de Migración, explicó que se trató de un error de la supervisora de la terminal aérea, quien presuntamente confundió a Vivanco con una persona con el mismo apellido que tiene un impedimento de salida del país debido a antecedentes criminales.
Represalia
Vivanco consideró que se trató de una represalia por el reciente informe de Human Rights Watch sobre supuestos casos de "desnacionalización" en el país.
El activista presentó ayer en esta ciudad un informe en el que afirma que "decenas de miles" de personas nacidas en el país de ascendencia haitiana están en peligro de ser expatriadas debido a la negativa del Estado a entregarles documentos de identidad.
El informe se refiere a personas nacidas en la República Dominicana de padres haitianos que nunca habían obtenido documentos.
La Junta Central Electoral (JCE) difundió la semana pasada una lista de 55,000 descendientes de extranjeros que pueden obtener sus documentos que les acredita como dominicanos.
La alerta del organismo internacional fue publicada en momentos en que el gobierno dominicano informó que comenzará a deportar a todos los extranjeros que carezcan de permiso de residencia, entre ellos miles de inmigrantes haitianos.
El informe de Human Rights Watch generó el rechazo inmediato del gobierno, a través del vocero de la Presidencia, Roberto Rodríguez de Marchena, quien afirmó ayer que "No podemos tolerar que cualquier persona venga a nuestro país, diga mentiras, pretenda hacerle daño a República Dominicana y no obtenga una respuesta".
Agregó que "si le falta el respeto a nuestro país sepa usted que nos va a tener de frente y que le vamos a responder".