Un pasaporte falso dominicano influye en la política norcoreana

Washington. Funcionarios del Gobierno de Corea del Sur están tratando de confirmar persistentes reportes desde Corea del Norte sobre el reciente fallecimiento de la querida favorita de Kim Jong Il, una antigua bailarina que fue elevada al panteón estatal comunista con el status de "madre respetada" y cuya muerte podría desatar la lucha por la sucesión presidencial en ese país asiático.

La mujer, Koh Young Hee, una bailarina coreana nacida en Japón, fue tratada en París la primavera pasada de un cáncer avanzado. En el verano, la señora Koh, de 51 años y madre de dos de los hijos de Kim, fue llevada de regreso a la capital norcoreana, Pyongyang, donde cayó en coma. El periódico japonés Sankei Shimbun reportó que diplomáticos norcoreanos en París habían adquirido un "extremadamente caro" ataúd y lo habían remitido en un vuelo chárter a Pyongyang.

En una historia publicada en el The Washington Post, firmada por James Brooke, se comenta que la muerte de la señora Koh podría provocar serios efectos psicológicos sobre Kim, que tiene problemas cardíacos y que había abandonado la bebida por consejo de la señora Koh.

Todas las especulaciones conducen a que el liderazgo de Corea del Norte cerrará aún más el país para manejar la muerte de la señora Koh a su manera y mantener el orden ante la lucha que surgiría entre los tres hijos de Kim Jong Il, de 62 años, por convertirse en su sucesor.

Hace dos años, la maquinaria de propaganda de Corea del Norte comenzó a promover a la querida favorita de Kim Jong Il, fomentando la especulación de que uno de sus dos hijos, Kim Jong Chul, de 23 años, o Kim Jong Woon, de 21, sería designado como heredero aparente del líder coreano. Fue la misma táctica utilizada por Il para su ascenso en 1994. "Si Koh no hubiese fallecido en este momento, uno de sus dos hijos hubiese sido el principal candidato a la sucesión", afirma Kim Duk Hong, que desertó de Corea en 1997. "Ahora que ella está muerta, los tres hijos están en la misma posición".

El otro hijo de Kim Jong Il, es Kim Jong Nam, de 34 años de edad, quien cayó en desgracia en el 2001, cuando fue detenido en el aeropuerto de Narita tratando de entrar a Japón utilizando un pasaporte de la República Dominicana. Acompañado por su hijo de 4 años y dos mujeres, dijo a la policía que estaba planeando visitar Disneyworld. Graduado en una preparatoria suiza, es visto como demasiado occidentalizado por los nacionalistas norcoreanos.

Parece que Kim Jong Nam sería el mejor candidato, pero Corea tiene una turbulenta historia de sucesión presidencial en la cual los asesinatos son frecuentes y el fiasco de Narita puede haberlo eliminado de la competencia.