Vecinos de los sectores Atala y El Portal, en el Distrito Nacional, denuncian continuos asaltos
Afirman que desde el pasado mes de diciembre viven en una zozobra con la delincuencia
SANTO DOMINGO. Los residentes de los sectores Atala y El Portal, en el Distrito Nacional, dicen que ya no saben qué hacer para evitar a jóvenes en motocicletas en horas del día y armados que asaltan a niños y adultos y en horas de la noche o en la madrugada escalan techos para penetrar a las viviendas.
Afirman que hay días que los mozalbetes logran atracar a varias personas en una misma calle y que los casos se han hecho tan frecuentes desde diciembre del pasado año que los ha obligado a cambiar de rutina y dejar, incluso, de ejercitarse por temor a ser la próxima víctima.
Eveline Plácido Almonte, residente del sector Atala dice que incluso dentro de sus casas no están seguros porque los ladrones escalan los techos para cometer sus actos delincuenciales y que, a pesar de que su vecina más próxima y ella decidieron colocar vallas encimas de las paredes que dividen las viviendas para que los mozalbetes no logren trasladarse por esa vía, recientemente su perro mordió la mano de alguien que la introdujo por la ventana a su habitación.
Plácido Almonte sostuvo que eso no es lo más grave, sino que dos niñas de su familia y un niño de tres años, a este último a quien los malhechores lo apuntaron con una pistola, ya han tenido que vivir la experiencia de un asalto.
Explica que el niño al que apuntaron con la pistola se trasladaba en horas del día con una joven que tenía un celular, lo que llamó la atención de los delincuentes.
Otro residente del sector Atala, July Cosme, indicó que la iglesia Cristo El Salvador, a la que asisten los que viven también en El Portal y el sector Honduras, ha sido asaltada en plena misa y que los delincuentes esperan a los que se ejercitan en el Mirador Sur justamente cuando suben la escalera.
Cosme y Plácido Almonte sostienen que los asaltos en el día ocurren regularmente entre 2:00 y 3:00 de la tarde y que los cacos recorren El Portal y el Atala y en minutos despojan de sus pertenencias a varia víctimas en diferentes esquinas.
En tanto que Virginia Espinosa e Iván Fernández sostienen que a los vehículos los delincuentes le rompen los cristales y le roban todo lo que tengan en su interior.
Espinosa y Fernández aseguran que constantemente deben vivir la experiencia de que abren la ventana y ven a alguien esperando que se duerman para penetrar a la vivienda.
Demandaron más vigilancia policial por la zona porque, aunque con sus quejas se ha enviado una patrulla con agentes honestos, no es suficiente porque una sola debe patrullar siete sectores, desde el sector El Túnel, antes de llegar a la Núñez de Cáceres, hasta la Zona Universitaria.