Puerto Rico en estado de emergencia y ”alerta" por posibles réplicas de terremoto

Casi un centenar de estructuras sufrió daños o colapsó, incluidas viviendas, escuelas, edificios, puentes, calles y oficinas municipales, en los pueblos de Guánica, Guallanilla, Peñuelas, Yauco y otros ubicados en la zona Sur de Puerto Rico.

En esa zona fue que se localizó el epicentro del terremoto, que a las 4:24 de la madrugada, hizo temblar paredes y techos, sacando de sus camas a los residentes en medio de gritos y pánico.

A seguidas del remezón, todo quedó a oscuras y tembló otra vez. Unas 250 mil personas perdieron el servicio de energía eléctrica en las últimas 48 horas.

El apagón lleva de la mano el mal recuerdo del huracán María, que tras su paso dejó a miles de familias sin energía eléctrica durante meses y zonas del interior del país, donde pasó más de un año hasta que prendió una bombilla o un abanico.

Con esa imágenes vivas en sus mentes, cientos de personas han salido a las calles necesitadas de apertrecharse de gasolina para sus plantas eléctricas.

En el escenario no hay certeza de nada.

A más de 13 horas de la salida de las plantas eléctricas, todavía la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico -AEE- no se ha pronunciado sobre cuál es el estado del sistema eléctrico nacional, ni el nivel de daños de las plantas distribuidoras que se apagaron durante el movimiento sísmico.

En conferencia de prensa con participación de funcionarios de la AEE, ni el director ejecutivo de la corporación, José Ortíz, ni la gobernadora de Puerto Rico, Wanda Vásquez, pudieron precisar cuándo se podría restablecer el servicio de electricidad a la población.

Miedo latente a un gran desastre

El miedo está en las calles, en las casas, en supermercados, estaciones de gasolina, en colmados y donde quiera, porque nada puede avisar con antelación la ocurrencia de un nuevo temblor. Y ya han sido tres, en escasas semanas.

El director de la Red Sísmica de Puerto Rico, Víctor Huérfano, indicó que hay preocupación y llamó a la ciudadanía a estar bien pendiente.

De su lado, el geomorfólogo José Molinelli dijo que "es normal que luego de movimientos telúricos se produzcan réplicas, incluso más fuertes que el movimiento sísmico original" y no se pueden descartar ocurrencias de mayor magnitud.

“Esto puede estar activo por semanas. En el caso del terremoto de 1918 estuvo temblando por un año”, sostuvo Molinelli, al recordar el terremoto de "San Fermín", un evento catastrófico en la isla.

Ese terremoto produjo - a su vez- un maremoto en el pueblo de Mayagüez.

"Corran que viene el mar", "Se mete el mar", gritaron desesperados los residentes de Mayagüez y Aguadilla el 11 de octubre de 1918, cuando se percataron de la llegada de un tsunami en la costa mayagüesana. Minutos antes la isla había sido sacudida por los temblores del terremoto de "San Fermín", de 7.3, considerado el más mortífero en la historia de Borinquen.

Desde 1988, la Sociedad Sismológica de Puerto Rico ha venido advirtiendo de la posibilidad de un sismo de gran catástrofe.

De hecho, la isla de Puerto Rico está ubicada al Sur de varias fallas y de la fosa marina conocida como la "Fosa de Puerto Rico" -con una longitud de 1,500 kilómetros- y en el límite de dos placas tectónicas que hacen fricción. El riesgo está presente y hasta estos momentos resulta imposible predecir la ocurrencia de otro temido desastre.