Las religiones monoteístas y sus comunidades en el país

En la República Dominicana domina el cristianismo como la mayor de las doctrinas, pero también conviven en el país la comunidad islámica y la judía con centros principalmente en Santo Domingo

El islam es una de las religiones en RD. Para el imán de la mezquita Masjud Al-Nour, esta no es solo el espacio para los musulmanes sino para todos. (Diario Libre/Matías Boncosky)

Las religiones monoteístas, cristianismo, judaísmo e islam, tienen en común la figura de Abraham, a quien consideran, según se mire,  padre de la fe y modelo de obediencia a Dios.

Cristianos y judíos sitúan a Abraham en el antiguo testamento, mientras que los musulmanes lo encuentran en el Corán.

Pese a que el 75 % de los 11 millones de habitantes de la República Dominicana se declara cristiano, católicos y evangélicos en su mayoría, aquí también existen comunidades judías y musulmanas. A nivel mundial, según el Pew Research Center, el islam reúne a 1.9 mil millones de fieles, mientras que el judaísmo a solo 14 millones.

En el país, ambas religiones coexisten con la sociedad dominicana. La religión islámica cuenta con la mezquita Masjud Al-Nour y la pequeña comunidad Ahmadiyya, ambas en Santo Domingo, y el judaísmo con una sinagoga en el centro de la capital.   

Comunidad islámica

Desde que se estableció a finales del siglo XIX y principios del XX, la comunidad musulmana en la República Dominicana ha ido creciendo. Según el imán de Santo Domingo, esto llevó un proceso gradual, como en cualquier lugar donde se expande su religión. Comienza con la migración de creyentes desde otros países y, sobre todo, se formaliza con la conversión de los nativos.

Los fieles tienen como lugares principales de reunión en el país la mezquita Masjid Al-Nour en Santo Domingo, y la mezquita Noor Al-Din en Santiago de los Caballeros. Ambos sirven como lugar de aprendizaje, oración y celebración. El imán de la capital explicó que su papel es de “enseñar el Islam”, subrayando que “la mezquita no solo es un espacio para los musulmanes (...) cualquier persona puede visitarla”. Aseguró que nunca han tenido problemas con diferentes religiones y siempre se acercan personas a resolver dudas.

Si bien no existe un censo exacto, se cree que hay entre 30,000 y 50,000 musulmanes en el país entre dominicanos, pakistaníes y otros. La comunidad abarca una significativa diversidad; en las oraciones de los viernes, las más concurridas, las nacionalidades de los asistentes son variadas. No es una religión monolítica, sino que refleja una gran variedad cultural.

También, el islam cuenta con una pequeña comunidad bajo el nombre de Ahmadiyya, de la que Mohamed Abdullah es su imán. Con cerca de 50 fieles, se reúnen en una casa y buscan acercar lo humano a dios a través de la paz y el amor. Syed es el líder de la comunidad en Estados Unidos, pero se encuentra temporalmente en la República Dominicana haciendo las veces de misionero y guía religioso. El centro, de dos pisos, cuenta con un centro de información y un archivo de libros con respuestas a preguntas como la figura de Jesucristo en el islam, el velo, las oraciones, tradiciones y normas.

El imán de la comunidad Ahmadiyya, Mohamed Abdullah.  Por (Matías Boncosky)
Fieles durante una de las oraciones diarias en la comunidad Ahmadiyya. Por (Matías Boncosky)
Fieles durante una de las oraciones diarias en la comunidad Ahmadiyya.  Por (Matías Boncosky)

Comunidad judía

Las sinagogas en el país son un espacio fundamental para la comunidad judía. Compuesta aproximadamente por 2,500 miembros, cuenta con varias sinagogas por el país e incluso preveen abrir una nueva en el este, pero la principal está en Santo Domingo con su rabino Shimón como líder.

Shimon explica que el judaísmo se fundamenta en 13 principios clave. Entre ellos, destaca la creencia en un único Dios y la expectativa de la llegada del Mesías. Un punto crucial que menciona es que “la educación de los hijos es central en nuestra doctrina”. Esto indica que la transmisión de valores y tradiciones es un pilar en la vida judía, asegurando que las futuras generaciones continúen la práctica y la identidad de la misma.

Uno de los momentos más importantes en la vida judía es el Shabat, que se celebra desde el viernes por la noche hasta el sábado por la noche. El rabino explica que durante este tiempo, las familias se reúnen para compartir una cena especial, donde la preparación y presentación de la comida son meticulosas.

“Es un momento donde la familia se reúne para disfrutar de una cena especial,” dice haciendo referencia a fechas de otras religiones como la Navidad para los cristianos. Asegura que el Shabat sirve como un recordatorio semanal de la espiritualidad y la conexión con Dios.

Sobre las sinagogas en el país, cada una está diseñada para ser un lugar acogedor y estéticamente agradable. El rabino destaca que “la casa de Dios tiene que ser más bonita que mi casa”, refiriéndose al respeto y la reverencia que sienten hacia estos espacios sagrados. La estructura de las sinagogas incluye una división entre hombres y mujeres durante los rezos, lo que favorece la concentración durante las oraciones. El rabino explica que esta división es esencial para crear un ambiente propicio para la devoción.

El rabino Shimón explicó que su papel en la comunidad ha sido importante para el crecimiento de la misma y que, consciente de las necesidades de sus miembros, ha traído a otros rabinos para colaborar en la atención de la comunidad. “Con el tiempo, vi la necesidad de traer más ayuda, y actualmente estamos trabajando para abrir un nuevo centro en Punta Cana”, menciona.

Sobre la relación con la sociedad dominicana, Shimón asegura que es el único país del mundo en la historia donde no ha sufrido persecuciones, pero, aún así, son conscientes con la historia del pueblo judío y asegura que “nos cuidamos por seguridad”.

Además, explicó que fue el primer país en América en abrir sus puertas formalmente a judíos durante la Segunda Guerra Mundial. “Aquí se abrió una ciudad construida por judíos, donde no solo recibieron visas, sino también recursos para comenzar una nueva vida,” afirma.

Periodista español y redactor en Diario Libre. Graduado en Periodismo por la Universidad de Navarra, España.