La Imperativa necesidad de un Centro de Información Toxicológica en la República Dominicana
Un enfoque integral para la salud, la economía y la seguridad nacional
La ausencia de un Centro de Información Toxicológica en la República Dominicana no solo constituye un vacío en el ámbito de la salud pública, sino que también tiene implicaciones económicas y repercusiones directas en la seguridad nacional. La creación de este centro es esencial para abordar tres componentes interrelacionados: salud, economía y seguridad nacional.
Salud: Salvaguardando la Vida y el Bienestar de la Población
En términos de salud, la presencia de sustancias tóxicas en el entorno diario representa un riesgo constante. La falta de un centro especializado con operación 24/7 dificulta la obtención de información rápida y precisa sobre las sustancias, sus efectos y las medidas de tratamiento. Esto se traduce en una respuesta menos eficaz ante emergencias toxicológicas, poniendo en peligro la vida de los ciudadanos.
La existencia de un Centro de Información Toxicológica 24/7 permitiría una atención inmediata y especializada en casos de intoxicación, reduciendo la morbimortalidad asociada. Además, desempeñaría un papel crucial en la prevención, educación y concientización, promoviendo prácticas seguras en el manejo de productos químicos y sustancias tóxicas en el hogar y la industria.
Epidemiología y Prevención
Además de sus beneficios directos en la gestión de intoxicaciones, la creación de un Centro de Información Toxicológica en la República Dominicana se erige como un pilar fundamental para abordar temas epidemiológicos y fortalecer estrategias de prevención a nivel nacional. La recopilación sistemática de datos sobre intoxicaciones permitiría la identificación de patrones y tendencias epidemiológicas, proporcionando información valiosa para la formulación de políticas de salud pública. Al comprender las fuentes y causas de las intoxicaciones, las autoridades de salud podrían diseñar e implementar programas de prevención específicos, dirigidos a reducir la exposición a sustancias tóxicas y mitigar riesgos a largo plazo. Asimismo, el Centro se convertiría en un recurso esencial para la educación continua de profesionales de la salud y la comunidad en general, promoviendo prácticas seguras y contribuyendo activamente a la prevención de enfermedades relacionadas con la exposición a agentes tóxicos. En este sentido, la creación del centro no solo sería un avance crucial para la atención de emergencias, sino también un paso significativo hacia la construcción de una sociedad más informada y resiliente desde el punto de vista epidemiológico.
Economía: Protegiendo la Industria y la Seguridad del Turismo
Desde la perspectiva económica, la presencia de sustancias tóxicas puede tener impactos significativos en diversas industrias. Sectores como la agricultura, la manufactura y la industria química podrían enfrentar consecuencias económicas adversas si no se aborda adecuadamente el manejo de productos tóxicos. La falta de información centralizada dificulta la implementación de medidas preventivas y de seguridad en estas áreas.
Además, en el contexto del turismo, uno de los pilares económicos de la República Dominicana, la seguridad y la percepción de riesgo son cruciales. Un Centro de Información Toxicológica brindaría confianza a los visitantes al garantizar una respuesta efectiva a situaciones de emergencia, como derrames químicos o intoxicaciones alimentarias. La reputación de la nación como destino turístico seguro y sostenible se vería fortalecida, respaldando así la estabilidad económica del país.
Seguridad Nacional: Fortaleciendo la Resiliencia y la Capacidad de Respuesta
En el ámbito de la seguridad nacional, la ausencia de un Centro de Información Toxicológica debilita la capacidad de respuesta ante amenazas químicas y biológicas. En situaciones de emergencia, la coordinación eficiente entre las autoridades, los profesionales de la salud y las fuerzas de seguridad es esencial. Un centro especializado proporcionaría la plataforma necesaria para la colaboración y el intercambio de información en tiempo real, fortaleciendo la resiliencia del país ante eventos adversos.
Experiencias Pasadas y Oportunidades
Aunque en la República Dominicana ha habido esfuerzos previos en el ámbito de la toxicología clínica, involucrando instituciones como la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU) y diversos hospitales públicos, aún no se ha establecido un verdadero Centro de Información Toxicológica avanzado y general, que pueda abordar de manera integral las necesidades del país en términos de manejo de intoxicaciones y envenenamientos.
En 2009, la República Dominicana emprendió la iniciativa de establecer el Centro de Toxicología (CENTOX) como una respuesta específica a la gestión de intoxicaciones y envenenamientos en el país. Este esfuerzo se manifestó en la implementación de una línea de consultas sobre intoxicaciones, como se informó en el enlace [hoy.com.do/la-rd-tiene-lista-una-linea-de-consultas-intoxicaciones/](https://hoy.com.do/la-rd-tiene-lista-una-linea-de-consultas-intoxicaciones/). A pesar de los avances iniciales, el proyecto enfrentó desafíos significativos, especialmente en términos de financiamiento insuficiente. La falta de fondos adecuados impidió el desarrollo pleno del CENTOX, comprometiendo su capacidad para operar de manera efectiva y brindar servicios integrales. La falta de respaldo económico limitó la capacidad del centro para ofrecer servicios de consulta, recopilar datos exhaustivos sobre intoxicaciones y desempeñar un papel proactivo en la educación pública. En última instancia, la carencia de fondos suficientes contribuyó al fallo del CENTOX en 2009, destacando la importancia crítica de la financiación sostenida para proyectos destinados a abordar problemas de salud pública y seguridad en el país.
La integración exitosa del Centro de Información Toxicológica en la República Dominicana con el sistema 911 sería un paso crucial para optimizar la respuesta ante emergencias. Al colaborar estrechamente con el sistema 911, el centro podría agilizar la atención a situaciones de intoxicación, garantizando una respuesta coordinada y eficiente de los servicios de emergencia. La interoperabilidad con el sistema 911 permitiría una identificación rápida de casos, una gestión adecuada de recursos y una comunicación fluida entre las entidades involucradas.
Además, desde el 2009 se tienen establecidos acuerdos colaborativos con el Puerto Rico Poison Center. Revivir este marco de cooperación permitiría compartir mejores prácticas, recursos y conocimientos especializados en toxicología. La experiencia acumulada por el Puerto Rico Poison Center podría servir como un valioso referente para el desarrollo y la mejora continua del Centro de Información Toxicológica en la República Dominicana, fortaleciendo así la capacidad de respuesta regional y la colaboración en situaciones de intoxicación transfronterizas. Esta sinergia contribuiría a establecer un frente común en la gestión de emergencias toxicológicas y promovería la seguridad de la población en ambas jurisdicciones.
La creación urgente de un Centro de Información Toxicológica con operaciones 24/7 en la República Dominicana es imperativa, abordando no solo las necesidades de salud pública, sino también protegiendo la economía y fortaleciendo la seguridad nacional. Este enfoque integral aseguraría un entorno más seguro y saludable para la población, impulsando simultáneamente el desarrollo sostenible y la estabilidad del país en múltiples dimensiones.
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Dr Amado Alejandro Báez
Especialista en Salud Pública, Medicina de Emergencias y Medicina Crítica.
Miembro del Consejo de Directores de la Academia Dominicana de la Medicina y del Clúster Turístico de Santo Domingo
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