Policía y Ministerio Público asumen investigaciones por ejecución de cuatro

La Policía Nacional está ampliando las investigaciones relacionadas con el hallazgo de cuatro cadáveres con múltiples heridas de bala en un terreno baldío cerca de una carnicería clandestina en la comunidad de Arroyo Caña, en el municipio de Rancho Arriba, provincia de San José de Ocoa.

Las víctimas han sido identificadas como José Miguel Mordan Villar, de 35 años; Concepción Coronado Paredes, de 33 años; Cesarín Liranzo, de 29 años; y un cuarto hombre aún no identificado. Se sospecha que en el lugar operaba un punto de venta de drogas.

Según el informe preliminar, varios individuos desconocidos llegaron al lugar portando armas de fuego y abrieron fuego contra las personas mencionadas anteriormente, quienes presuntamente estaban involucradas en la operación del punto de venta de sustancias controladas.

Representantes del Ministerio Público, agentes de la Policía Científica y de la Dirección Central de Investigación (DICRIM) se presentaron en la escena del crimen para recopilar pruebas y analizar la evidencia.

No hay agentes

El alcalde del municipio de Rancho Arriba, en la provincia de San José de Ocoa, denunció que la comunidad cuenta solamente con cinco agentes de la Policía Nacional para más de 25,000 habitantes.

Este sábado se encontraron cuatro cuerpos en el barrio Gualey de la comunidad de Arroyo Caña, en el municipio de Rancho Arriba, presuntamente relacionados con el narcotráfico.

"A través de todos los medios hemos solicitado que se resuelva el problema de la falta de presencia policial y de las autoridades responsables. No contamos con un fiscal que esté al tanto de estos asuntos, ni con una dotación policial adecuada", expresó Arcenio de los Santos.