Haití, un año de crisis en cascada y el espejismo de una intervención
Las bandas armadas se aprovecharon del vacío que quedó en medio de una disputa en la línea de sucesión política en Haití
La crisis que sacude a Haití no es nueva. Pero en algo en que coinciden los analistas y los organismos internacionales es que este año ha sido devastador para la población más vulnerable, la que carga más pesado con la situación.
No existe un solo factor que explique la situación actual en el país vecino. La crisis araña el nivel político, social, económico, de seguridad, humanitario y hasta de salubridad con el resurgimiento del cólera luego de tres años sin que se reportara un caso.
La emergencia humanitaria, empeorada por la enfermedad y el limitado acceso a los servicios más básicos, justificaron el pedido del Gobierno de Haití sobre el despliegue de una fuerza de seguridad para apoyar a la Policía Nacional y hacer retroceder a las bandas armadas.
El poder de las pandillas
Crisis Group resume en su informe que las bandas armadas en Haití se aprovecharon del vacío que quedó en medio de una disputa en la línea de sucesión política luego del asesinado del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021.
Desde entonces, y en este año, se han vuelto más autónomos, consiguieron arsenales más grandes, ampliaron su control territorial, subieron sus demandas políticas y se volvieron más audaces en el combate frontal con las fuerzas de seguridad.
Según datos de la ONU desde principios de este año en Haití murieron 1,448 personas, 1,145 resultaron heridas y 1,005 fueron secuestradas por las bandas armadas que obligaron a 96,000 personas a huir de sus hogares debido a la inseguridad en la capital, Puerto Príncipe.
A las bandas armadas se les atribuye tener el control del más del 60 % de las zonas de la capital. Adicional a esto, las pandillas también controlan vías y lugares cruciales para el flujo de mercancías, como combustibles y alimentos.
Las actividades de las plantillas, compuestas principalmente por jóvenes de áreas urbanas pobres según Crisis Group, no contribuyen a la rápida intervención de los casos sospechosos de cólera debido a que estos se registran en los barrios más marginados y que son controlados por ellas.
Violencia sexual
La ONU describió en un desgarrador informe que las bandas criminales en Haití están utilizando la agresión sexual para aterrorizar a la población y consolidar su poder territorial.
“Convertidos en objetos sexuales, las mujeres, las niñas y, en ocasiones, los hombres, también son obligados a convertirse en “parejas” de elementos armados en feudos de las bandas. Rechazar las demandas sexuales puede conllevar represalias, entre ellas, asesinatos y ataques incendiarios”, se lee en el informe que documenta minuciosamente los delitos sexuales perpetrados contra mujeres, niñas y niños de todas las edades, así como contra hombres en menor medida.
Una misión que no llega
La comunidad internacional está considerando si desplegar una fuerza extranjera en Haití para apoyar a la Policía Nacional en el restablecimiento de la seguridad y así lograr que una nueva administración llegue al poder, luego de celebrarse elecciones en todos los niveles del Estado.
Por lo menos así lo espera el primer ministro de Haití, Ariel Henry, cuando habló en un encuentro con el cuerpo diplomático acreditado en el país y los organismos internacionales. El político espera que la misión compuesta por fuerzas de varias naciones llegue en un futuro cercano.
“Agradezco al secretario general (António Guterres) de la ONU por trasladar al Consejo de Seguridad nuestra solicitud de asistencia de una fuerza especializada para acompañar a nuestra Policía Nacional”, escribió Henry en su cuenta de Twitter.
Son Estados Unidos y México quienes han tomado un paso adelante en preparar un borrador ante el Consejo de Seguridad de la ONU para autorizar el despliegue de la misión extranjera hacia Haití, que sea ajena al organismo internacional, con alcance limitado y que sea encabezada por un Estado socio. Canadá es quien se vislumbra para liderar esa misión, aunque no lo hará hasta que no exista un consenso entre los actores políticos.
El necesario convenio entre los actores políticos y civiles busca que la misión tenga legitimidad y que sus operaciones en terrenos difíciles sean respaldadas, teniendo en cuenta los riesgos operativos de las áreas en que actúe. “Un plan integral de ayuda internacional también debe incluir una serie de otras medidas para abordar las décadas de malestar e inestabilidad institucional de Haití”, consideró Crisis Group.
La República Dominicana también apoya el envío de una fuerza robusta, capaz de recuperar la paz y poner fin a la violencia de las bandas armadas, infiltradas por el poder político y el económico. No ha habido un escenario internacional donde el país no llame la atención ante la grave situación humanitaria y de inseguridad que se vive en Haití, que ha desbordado sus fronteras y presiona a la República Dominicana, con la cual comparte la isla.
Personas han fallecido de cólera en Haití al 24 de diciembre y desde que se documentó el resurgimiento de la enfermedad.
Sanciones
El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó una resolución que impone un régimen de sanciones contra Haití . Teniendo eso en cuenta, Canadá sancionó a dos exministros de Justicia de Haití acusados de corrupción y lavado de dinero en favor de poderosas bandas.
Las sanciones tienen como objetivo ejercer presión sobre los responsables de la violencia en curso en Haití. Ottawa impuso sanciones al expresidente haitiano Michel Martelly y a los dos ex primeros ministros Laurent Lamothe y Jean-Henry Céant. También, al único multimillonario de Haití, Gilbert Bigio, y a los empresarios Reynold Deeb y Sherif Abdallah.
Sin alimentos
La crisis humanitaria en Haití también se consolidó cuando la ONU reveló que 4.7 millones de haitianos, el 40?% de la población del país, sufren actualmente inseguridad alimentaria. Entre ellos, 1.8 millones de personas en fase de emergencia y, por primera vez, 19,000 que están en “niveles catastróficos” de hambre, explicó el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU.
RD apoya el envío de cascos azules a Haití, pero Rusia y China lo vetan
Desde Calamar a Quirino y Figueroa Agosto, la Procuraduría entrega bienes al Estado
Legisladores no reportan vehículos exonerados en declaraciones de bienes
La autopista Duarte: el corredor de la muerte
Industriales exigen fortalecer la lucha contra el comercio ilícito