Someten recurso para que Elizabeth Silverio sea puesta en libertad

Los abogados de Elizabeth Silverio Sillien interpusieron una acción de hábeas corpus a favor de la acusada de estafa y de hacerse pasar por neurocirujana a fin de que esta sea puesta en libertad.

Cándido Simón, Rafael O. Helena y Manuel Escoto Minaya, representantes de la imputada, insisten en que la decisión de la jueza Fátima Veloz viola el Código de Procedimiento Penal que, según ellos, "en los casos de acción pública la medida de coerción solo procede a solicitud del Ministerio Público".

"En la ley procesal no está previsto que un caso de acción pública como este, los querellantes puedan solicitar y la jueza disponer medida de coerción, por lo que es ilegal la prisión, lo que habilita el juez de los habeas corpus a disponer su inmediata puesta en libertad", afirman los togados.

La acción de hábeas corpus que, según la ley, debe conocerse de manera rápida, fue formulada ante la Cámara de lo Penal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional por la vía de la Presidencia para que se asigne la sala unipersonal que deberá conocerlo.

Fue dada de alta y transferida a la cárcel

La acusada estuvo recluida por dos días en un centro de salud, fue dada de alta ayer e inmediatamente transferida al Centro de Rehabilitación Najayo-Mujeres, donde se le impudo tres meses de prisión preventiva.

La prisión se le dispuso a solicitud de los abogados de Salud Pública y de los representantes de los padres de los niños del Centro de Terapias Neurocognitivas y psicopedagógicas Knowledge Land Kogland, que dirigía Silverio.

Aunque Simó dijo que Salud Pública no solicitó la prisión, su colega Pablo José Viloria, abogado de Salud Pública, dijo que se athierieron a lo que pidieron los representantes de los padres de los menores.

El Ministerio Público había solicitado arresto domiciliario.