El Supremo acepta denuncia contra expresidente Fernando Collor por corrupción
BRASILIA. La Corte Suprema de Brasil aceptó hoy una denuncia contra el expresidente y actual senador Fernando Collor de Mello (1990-1992) por los supuestos delitos de corrupción, lavado de dinero y asociación ilícita en un caso relacionado con la trama de corrupción en Petrobras, informaron hoy fuentes judiciales.
La segunda sala del máximo órgano de la Justicia brasileña aceptó por unanimidad la denuncia presentada por la Fiscalía en la que se acusa a Collor de recibir 29 millones de reales (unos nueve millones de dólares) en supuestos sobornos derivados de la red corrupta destapada en el seno de la petrolera estatal.
La Fiscalía asegura en la demanda que el senador recibió ese montante a cambio de su supuesta influencia política en BR Distribuidora, subsidiaria de Petrobras en la venta de combustibles.
Los magistrados de la segunda sala siguieron el parecer del instructor del caso Petrobras en el Supremo, el magistrado Edson Fachin, quien entendió que la denuncia contiene indicios legales que autorizan la apertura de una acción penal contra el exmandatario.
La denuncia además da por comprobado que Collor compró con parte del dinero de los sobornos autos de lujo, entre ellos un Lamborghini, valorado en un millón de dólares, un Ferrari, un Bentley y dos Land Rover.
En julio de 2015, dichos vehículos fueron confiscados por las autoridades en la residencia particular del senador en Brasilia.
A pesar de aceptar la denuncia, los magistrados del Supremo descartaron otras acusaciones contra Collor en el mismo proceso, como los de desvío de dinero público y obstrucción a la Justicia, por supuestamente impedir las investigaciones.
A partir de ahora, la defensa del expresidente podrá presentar pruebas de inocencia y solo al final del proceso, cuando se celebre el juicio, se dictaminará una sentencia con la eventual condena o absolución por los hechos que le imputan.
El escándalo en torno a los millonarios desvíos en Petrobras ya ha enviado a prisión a varios políticos y empresarios, ha salpicado a la figura del presidente Michel Temer y a varios de sus ministros, así como a los exmandatarios Dilma Rousseff y Luiz Inácio Lula da Silva, condenado en primera instancia a nueve años y medio de prisión por supuestamente haberse beneficiado de la trama.