Damasco advierte a EE.UU. de que acabará con su presencia en territorio sirio
BEIRUT. El Gobierno sirio advirtió ayer de que acabará con la presencia de EE.UU. en su territorio, donde el Ejército nacional recuperará el control de todo el país, según la agencia de noticias oficial SANA.
El Ejecutivo sirio reaccionó así a la iniciativa lanzada por Washington y las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza encabezada por milicias kurdas, de crear un cuerpo de 30.000 combatientes que se desplegará en áreas fronterizas de la autoproclamada administración autónoma kurdosiria.
Una fuente del Ministerio sirio de Exteriores declaró a SANA que “el pueblo y el Ejército sirio están resueltos a frustrar esta conspiración, acabar con la presencia de EE.UU. y sus agentes en Siria y restablecer la autoridad legítima en todo el territorio”.
Dicha fuente consideró, además, que la nueva fuerza fronteriza obstruye cualquier solución al conflicto y se dirige a una salida militar a la guerra.
A su juicio, la formación de ese contingente “viene en el marco de las políticas destructivas en la región para destruir Estados, alimentar tensiones y entorpecer soluciones a la crisis”.
Un portavoz de las FSD, Mustafa Bali, explicó ayer que esa guardia fronteriza operará en zonas limítrofes con Turquía e Irak, así como en la líneas de contacto con las tropas gubernamentales sirias.
La fuente del Ministerio de Exteriores advirtió de que todos los ciudadanos sirios que participen en ese batallón “traicionan al pueblo y la patria” y que el Gobierno del país los tratará sobre esta base.
Asimismo, insistió en que esa iniciativa es hostil a la nación árabe y sirve “al proyecto americano-sionista” en la región.
En su opinión, representa un ataque flagrante a la soberanía, unidad y seguridad del territorio sirio y una “violación escandalosa” de la ley internacional.
Por ello, “la República Árabe de Siria insta a la comunidad internacional a condenar el plan americano y a actuar para poner fin a la arrogancia y la mentalidad hegemónica que gobierna las políticas de administración estadounidense y que supone las peores consecuencias para la paz y la seguridad mundial”, zanjó la fuente.