Cuando se tiene tanto poder que hasta las autoridades le temen

Jeffrey Epstein, acusado por la fiscalía de Manhattan de dirigir una supuesta red de abuso a menores de edad a las que obligaba a sostener relaciones sexuales, ha solicitado que la medida de coerción por el caso consista en el pago de una fianza.

A Epstein se le sindica tener una isla en un país del Caribe a las que llevaba a estas jóvenes y realizaba sus fiestas.

La defensa alega que tiene suficiente arraigo para evitar su fuga, pero la fiscalía piensa distinto. Los federales están argumentando que Epstein, quien está acusado de tráfico sexual , no debería recibir una fianza en espera de un juicio debido a la capacidad potencial del ex hombre de dinero para comprar su camino a la libertad.

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Multimillonario estadounidense inculpado por crear una red de tráfico sexual de menores

La fortuna de Epstein está distribuida de la siguiente forma: 56.5 millones de dólares en efectivo, 14 millones de dólares en renta fija, 112 millones de dólares en renta variable, 194 millones de dólares en fondos de cobertura, y propiedades valoradas en 63.9 millones de dólares, lo que totaliza una fortuna de unos 559 millones de dólares.

Mientras tanto, el juez del caso, Richard Berman, también incluyó en el expediente de publicación el lunes una transcripción de una audiencia de 2011 ante el juez de la Corte Suprema de Manhattan, Ruth Pickholz, en la que la fiscal de distrito adjunta Jennifer Gaffney, entonces subdirectora de delitos sexuales de la Fiscalía de Manhattan. Argumentó para que Epstein obtuviera una clasificación más indulgente de los delincuentes sexuales.

Pickholz fue sorprendido por el argumento, de acuerdo con los documentos, que han sido públicos.

“Tengo que decirle que estoy un poco abrumado porque nunca he visto a la oficina del fiscal hacer algo como esto”, dijo el juez. “Nunca lo he visto.”