Chavismo se felicita por “participación récord” en votación para Constituyente
CARACAS. El chavismo gobernante se felicitó ayer por la “participación récord” que, a su juicio, se registró en las elecciones de este domingo a la Asamblea Nacional Constituyente convocada por el presidente Nicolás Maduro, al final de una jornada de votación marcada por las protestas y la muerte de al menos 8 personas.
“Respecto a la participación, récord”, afirmó el primer vicepresidente del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, que calificó la elección de ayer de “victoria ejemplarizante” para su proyecto político.
El influyente político chavista compareció ante los medios rodeado de otros pesos pesados de su movimiento, y celebró que “a pesar de todos los intentos de violencia que no fueron ni siquiera ocultados” por “los dirigentes de la oposición”, Venezuela dio un “ejemplo para todo el mundo” de “empoderamiento” del pueblo.
“La semilla que el comandante Hugo Chávez sembró en tierra fértil hoy está dando sus frutos”, agregó Cabello, que recordó que esta asamblea se instalará en los próximos días y sus decisiones deberán ser acatadas por todos los poderes, incluido el Parlamento, de mayoría opositora.
Cabello afirmó que la asamblea comenzará a legislar leyes constitucionales y otro tipo de resoluciones, y que se instalará en el Palacio Federal que hasta ahora ocupaba el Parlamento, de mayoría opositora, sin descartar que ambas asambleas convivan en el recinto como ya ocurrió en el proceso constitucional de 1999.
El dirigente oficialista ridiculizó la estimación del voto ofrecida por la oposición -que asegura tener informadores en todos los colegios electorales-, según la cual solo el 12 % del electorado habría acudido a las urnas hoy, y animó a sus seguidores a celebrar los resultados en el centro de Caracas.
Las elecciones de hoy servirán para elegir, entre una oferta de candidatos íntegramente chavista, a los más de 500 integrantes de la Asamblea Nacional Constituyente, que tendrán facultad para reordenar el Estado sin que ningún otro poder se les oponga.
La oposición se ha negado a participar en el proceso al considerarlo un fraude, y ha intentado detenerlo con constantes protestas que han sido dispersadas constantemente por la fuerza de seguridad.
Según sus detractores, este proceso -que es rechazado por la Iglesia venezolana, la patronal, algunos sindicatos y rectores universitarios- permitirá al chavismo gobernante -en el poder en Venezuela desde 1998- consolidar una dictadura en el país.
Vario países como EE.UU., Colombia, México, Panamá, Argentina, España y la Unión Europea, entre otros, ya han adelantado que no reconocerán a la Asamblea salida de la elección de ayer.