La paradoja entre educación y tecnología en nuestro país
La educación es una de las métricas que se utilizan para medir el progreso de las Naciones, y es a través de ella que se forman los futuros profesionales de las diferentes áreas del mercado.
En un mundo cada vez más digitalizado, la educación dominicana continúa dando pasos cortos en la implementación de las nuevas tecnologías en las prácticas pedagógicas.
En 2016, el Poder Ejecutivo emitió el Decreto 258-16 en el cual se creó el programa conocido como “República Digital”, que busca promover la implementación de tecnologías en la educación y procesos gubernamentales.
Uno de los elementos planteado dentro del proyecto es el de dotar a estudiantes y profesores de un computador, bajo el lema de “un estudiante, una computadora-un maestro, una computadora” establecido en el Plan Estratégico 2017-2020 del Ministerio de Educación de la República Dominicana (MINERD).
La implementación de estas tecnologías busca “transformar el proceso de enseñanza-aprendizaje y a su vez reducir la brecha digital y del conocimiento para permitir el desarrollo de la competencia científica y tecnológica en los estudiantes...”, según lo establecido en el documento oficial del MINERD.
Un diagnóstico de la situación de la educación en el país, realizado por el MINERD, ordenó los problemas que enfrenta el sistema educativo nacional entre ellos: el bajo porcentaje de formación en los docentes, la falta de energía eléctrica y conectividad en los centros educativos y la falta de personal técnico cualificado.
Las soluciones del MINERD a estas dificultades son las de dotar a 950 mil estudiantes y 79 mil maestros con dispositivos electrónicos; al mismo tiempo que el de capacitar a los docentes.
También esperan dotar de electricidad y conexión a internet a más de dos mil centros educativos.
Sector Público
“Entiendo como deficiente la relación de la tecnología y educación, los esfuerzos realizados por el gobierno no han sido suficientes”, asegura Damián Morel, profesor y director del Centro Educativo Francisco Antonio Castillo Salcedo de la provincia Espaillat.
Morel explicó, durante una entrevista a Diario Libre, que la falta de energía eléctrica lleva a que el laboratorio de informática del centro educativo no pueda ser utilizado.
Enfocándose en el tema de los profesores, Morel cometó que a pesar que los maestros muestran su disposición en la adopción de nuevas tecnologías en sus prácticas pedagógicas, son las carencias de herramientas y dificultades eléctricas que hacen imposible crear un ambiente educativo que esté reforzado por elementos tecnológicos de multimedia.
Sector Privado
Noemí López, directora del Colegio Pedagógico Creando, en Moca, asegura que la institución ha trabajado en una plataforma digital como herramienta de enseñanza, lo que llevó a la utilización mínima de los libros de textos.
Para López, quien fue entrevistada por Diario Libre, “la principal dificultad que enfrentamos los centros educativos es que no hay una plataforma que contenga los contenidos digitales, donde los alumnos puedan acceder de manera gratuita, como en otros países.”
Datos del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (INDOTEL) en su reporte de junio 2018, establece que en el país existen un total de 8,861,222 líneas de telefonía móvil, de las cuales 7, 239, 416 tienen acceso a internet.
Estos datos sirven para contextualizar la posibilidad que tiene la sociedad dominicana de interactuar con las tecnologías y sus diferentes herramientas.
Mientras los Millennials son una generación que adoptó las nuevas tecnologías, la generación Z creció entre ellas; por lo que, los estudiantes dominicanos se enfrentan a una paradoja, de vivir en una sociedad con acceso a las tecnologías, pero que educa sin ellas.