Terminal de Autobuses del Este: ni una cosa ni la otra

A pesar de que hace más de ocho meses que el pasado gobierno inauguró la estructura en la que funcionaría la Terminal de Autobuses del Este, la obra sigue sin uso por parte de las nuevas autoridades y el lugar es utilizado por perros callejeros como refugio.

La estructura está lista para ser utilizada para lo que fue creada, tiene sus escaleras eléctricas, iluminación, división interna, plantas eléctricas, en algunos lugares las sillas para las salas de espera de los pasajeros y hasta los extintores contra incendios.

El lugar es custodiado celosamente por militares al servicio del Ministerio de Obras Públicas, pero también hay seguridad privada. Al momento de la visita de Diario Libre por los alrededores de la infraestructura, algunos camiones descargaban objetos metálicos. El pasado gobierno invirtió alrededor de 700 millones de pesos en su construcción, conforme informaron las autoridades de entonces.

Tres plantas eléctricas permanecen sin usar, al igual que el resto de la infraestructura de dos niveles, mientras la gente está a la expectativa de lo que se hará.

En la Alcaldía de Santo Domingo Este se ha informado en varias ocasiones que en el lugar se construiría un centro de emprendurismo y una escuela de Bellas Artes. En un consejo de gobierno encabezado por el presidente en el municipio se creó una comisión para adelantar esos planes, pero nada se ha hecho, al menos en el lugar.

Se alega que el Ministerio de Obras Públicas no ha entregado definitivamente la obra, pese a que fue inaugurada por el pasado gobierno días antes del cambio de administración, el 16 de agosto de 2020.

Otra terminal, pero ni a medio talle

Esa obra era parte de otras tres terminales de autobuses que se construirían en otras partes de las entradas a la ciudad, como el caso de la que se construye al lado de la estación “Mamá Tingó” de la línea 1 del Metro de Santo Domingo.

Esta terminal también está paralizada prácticamente desde que asumieron las actuales autoridades. En algunas ocasiones se han avanzados los trabajos, pero en muy pocas ocasiones.

Aquí las estructuras metálicas tienen tiempo arrumbadas, al igual que las varillas que se oxidan por efectos de las lluvias, el sol y el sereno.

Las autoridades del Ministerio de Obras Públicas no informan sobre la continuidad de la obra, mientras las empresas que la estaba construyendo tiene sus oficinas cerradas en el lugar.