Víctor D´Aza y su visión de la Séptima Palabra “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”
El secretario general LMD llama a adaptarse a realidad
El secretario general de la Liga Municipal Dominicana, Víctor D´Aza, se mostró esperanzado en que continúen registrándose cambios en la nación, con un gobierno ético y moral que combata los males de la corrupción y la impunidad.
Al analizar la Séptima Palabra: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”, precisó que esta semana de recogimiento y reflexión encuentra al país abrumado por la pandemia, pero con la esperanza de un cambio por la vacuna.
En su opinión, el mundo atraviesa por grandes retos, y el país ha tenido que adaptarse a una realidad que, para mucha era impensable, debido a .la pandemia causada por el Covid-19, que ha cambiado la forma de vivir.
“Que Dios siga brindando sabiduría a nuestro presidente Luis Abinader para que siga con bríos aplicando medidas en combate al COVID 19, y que continúe el cambio en la nación, con un gobierno ético y moral, de combate a los males de la corrupción y la impunidad”, dijo finalmente.
“Aprovechemos estos días para reflexionar, cuidarnos y encontrar la paz en Cristo Jesús”.
Séptima Palabra: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu” (San Lucas 23, 46)
Es la séptima palabra, con la que se pone fin a la Pasión y vida terrenal de Jesús. Representando la entrega, la paz, la serenidad, la confianza y el amor de un hijo que se abandona a los brazos de su padre. El sacrificio de Cristo es la evidencia tangible de lo que significa el verdadero amor de Dios para con nosotros en la tierra: un amor que se dona, que se entrega, que sobrepasa el sufrimiento y lo glorifica.
Jesús parte entregando su cuerpo físico, pero no su alma. Porque devolvió su espíritu a su Padre no con reproches, ni soberbias, sino con un grito triunfante de entrega y sumisión. Es evidente que las Siete palabras reflejan su dolor en la cruz, pero también su confianza en Dios.
En la época actual el mundo atraviesa por grandes retos, hemos tenido que adaptarnos a una realidad que para muchos probablemente resultaba impensable, la pandemia causada por el Covid-19, que ha cambiado la forma de vivir y el modo de relacionarnos, muchas personas han perdido a familiares, sus empleos, sus ahorros, su normalidad.
Esta semana de recogimiento y reflexión nos encuentra abrumados aún por la pandemia, pero con la esperanza de un cambio por la vacuna que aplica el gobierno en la población.
El país recupera su economía y el activismo de su desarrollo, aunque de manera progresiva, que el Banco Central anuncia un crecimiento económico, pese a las restricciones.
Que Dios siga brindando sabiduría a nuestro presidente Luis Abinader para que siga con bríos aplicando medidas en combate al COVID 19, y que continúe el cambio en la nación, con un gobierno ético y moral, de combate a los males de la corrupción y la impunidad.
Esta semana mayor que los dominicanos tomen las previsiones para protegerse y mantener el distanciamiento para evitar los contagios, así como mantener prudencia cualquiera que sea su destino en este asueto.