Tras miles de muertos por COVID, ahora Trump “lo entiende”, pero no
“No le tengan miedo al COVID. No permitan que domine su vida”, tuiteó Trump
También viajó en su auto exponiendo al contagio a miembros de su seguridad
Ahora que ha contraído COVID-19, el presidente Donald Trump dice que “lo entiende”. Esa revelación, después de siete meses de pandemia y más de 210.000 muertes en Estados Unidos, no representa la primera vez que se ha apoyado en su experiencia personal para moldear sus puntos de vista.
Dijo que ahora “comprende” al coronavirus. Pero debido a su propia experiencia, como un paciente en una de las mejores instalaciones médicas de la nación con opciones de tratamiento que están al alcance de muy pocos, el presidente también reafirmó que se le dificulta identificarse con los estadounidenses comunes, de los cuales millones han perdido sus empleos debido a la pandemia.
De la misma forma en que lo ha hecho en las relaciones con otros países, Trump le ha dado prioridad a su propia experiencia personal por encima de la de los expertos. Se ha mostrado renuente, por ejemplo, a reclamarle al presidente ruso Vladimir Putin por la interferencia en los comicios estadounidenses a pesar de la evidencia clara proporcionada por la comunidad de inteligencia de Estados Unidos de que ello ha ocurrido.
También se ha sustentado con frecuencia en su experiencia en el mundo empresarial o en su propia familia para establecer la agenda de la Casa Blanca. Dijo que su perspicacia en los negocios le ayudó a lograr un acuerdo para establecer la embajada estadounidense en Jerusalén, y señaló que comprende al sector de las aerolíneas gracias al tiempo que pasó operando la fallida Trump Shuttle.
A pesar de las conferencias de prensa que los principales expertos del país en enfermedades infecciosas han ofrecido durante meses, fueron sus propios síntomas los que —dijo— le permitieron tener una mayor comprensión del letal virus.
Sin embargo, dicha comprensión pareció no concordar para nada con las directrices de expertos en salud pública sobre cómo se comporta el virus y las precauciones que deben tomar las personas infectadas, especialmente las que están en un grupo de alto riesgo como el presidente.
“Ha sido un recorrido muy interesante', afirmó Trump en un video publicado el domingo por la noche. “Aprendí mucho acerca del COVID. Lo aprendí al realmente ir a la escuela. Esta es la verdadera escuela. Y lo entiendo, lo comprendo, y es algo muy interesante, y voy a estarles informando acerca de esto'.
Pero pronto quedó claro que, en realidad, no lo entendió.
Trump hizo un recorrido repentino en una caravana para rendir homenaje a sus simpatizantes, exponiendo a un posible contagio a los agentes del Servicio Secreto que iban en el vehículo con él. Al día siguiente, cuando anunció que regresaría a la Casa Blanca, asumió un tono que dejaba entrever que no se identificaba con los estadounidenses que sufren y que no tienen acceso al mismo nivel de atención médica que reciben los presidentes.
“No le tengan miedo al COVID. No permitan que domine su vida”, tuiteó Trump. 'Hemos desarrollado, durante el gobierno de Trump, algunos fármacos y conocimientos realmente estupendos. Me siento mejor que hace 20 años”.
En ningún momento desde que dio positivo al virus el mandatario se ha referido a otras personas afligidas por la letal enfermedad. Su rival demócrata en las elecciones, el exvicepresidente Joe Biden, lo exhortó el lunes a modificar en esencia la forma en que maneja la pandemia.
“Me alegré de ver al presidente hablando y grabando videos el fin de semana', afirmó Biden en Miami. “Ahora que está ocupado tuiteando mensajes de campaña, le pediría que haga lo siguiente: Escuchar a los científicos, respaldar el uso de mascarillas'.
Aunque el virus afectó a viejos amigos suyos, como Stanley Chera, un desarrollador de Nueva Jersey que falleció de la enfermedad en abril, Trump no cambió de punto de vista y siguió hablando del virus como si pronto se convertiría en algo del pasado.
“Siempre hemos dicho que él carece de capacidad para la empatía. Su sentido de amor propio es tan abrumador que ve todo lo que pasa en el mundo a través del lente de lo que hace para él”, dijo Eddie Glaude, presidente del departamento de Estudios Afroestadounidenses de la Universidad de Princeton.
“A pesar de que más de 200.000 estadounidenses han muerto, no acaba de captar la naturaleza de la crisis a menos que realmente lo toque a él', dijo Glaude. “¿Alguna vez podrá representar a alguien que no sea él mismo?”
Trump podría aprender de sus propias experiencias, pero muy rara vez reconocerá haber cometido un error, dijo su exasesor de campaña Sam Nunberg.
“Una vez dijo: ‘Es lo que es’ acerca del impacto de COVID. Su video (del domingo por la noche) fue mejor que eso, fue probablemente lo más cerca que va a estar de ofrecer una disculpa', dijo Nunberg. “Él no es así”.
La Casa Blanca ve las cosas en forma distinta.
“Ahora él tiene experiencia combatiendo al coronavirus como individuo', dijo Erin Perrine, portavoz de campaña. “Joe Biden no tiene eso”.