Recluso que raptó comandante de la cárcel del 15 de Azua estaba preso por matar a un policía
De acuerdo a familiares, Maikol Deivy Ramírez (Yembrón) fue condenado a 20 años y había cumplido 14
El recluso Maikol Deivy Ramírez (Yembrón), quien fue ultimado este lunes luego de tener raptado al comandante de la cárcel del 15 de Azua, guardaba prisión por haber matado a un policía.
El dato lo suministró la Policía Nacional en una nota de prensa. Afirmó que el hombre de 38 años estaba preso “por varios hechos criminales, entre ellos la muerte de un agente policial”. No reveló el nombre del agente que ultimó ni la fecha y circunstancias.
De acuerdo con versiones de la familiares, Ramírez fue condenado a 20 años de reclusión, de los cuales había cumplido ya 14.
La uniformada reveló que el preso “cayó abatido en medio de la operación desplegada por fuerzas policiales tácticas” la tarde de este lunes.
Los hechos, según la PN
Esto ocurrió horas después de que el recluso mantuviera como rehén al comandante de la referida prisión, el coronel Ricardo Bidó, y al agente penitenciario Alberto Montilla. Supuestamente eran retenidos por el hoy occiso en la oficina del oficial, ubicada en el penal.
La institución dijo también dijo “tenía encañonado” con un arma al coronel Bidó cuando penetraron a la oficina para rescatarlo.
- “Durante las negociaciones, se informó que Ramírez había herido al coronel Bidó, lo que llevó a los agentes a ingresar al penitenciario”, indica el documento suministrado a la prensa por la uniformada.
La Policía informó que el comandante de la cárcel se estaba “fuera de peligro”, debido a que recibió las debidas atenciones de manera oportuna, “y se encuentra recuperándose en un centro de salud”.
El Ministerio Público está a cargo de la investigación, agregó la entidad. Se investiga también cómo el recluso obtuvo el arma.
"A mí no me van a matar así"
En un video que circula en las redes sociales, se observa al coronel Bidó herido en el suelo y a otras personas en una habitación. Se escucha una voz, que se presume es la del recluso, que dice: "A mí no me van a matar así". También pide hablar con la prensa para liberar a los rehenes. Igualmente, le dice al coronel que admita que la herida que presentaba se la causó él mismo "en un forcejeo" a lo cual el oficial responde "sí".