Médico militar acusada de decapitar a su hija insiste en que es inocente
Dice que tal vez fue "un espíritu maligno, algún demonio" que haya cometido el crimen
La médico militar Ana Josefa Garcia Cuello acusada de decapitar a su hija de seis años, el pasado jueves, continúa alegando su inocencia. Indicó que sería incapaz de hacerle algo así a su vástago.
A su llegada al Palacio de Justicia de Santo Domingo Este, donde estaba programado que se le conocería medida de coerción este domingo por el crimen, García Cuello dio una nueva versión a la prensa sobre los hechos, en la que explicó que se encontraba orando con los miembros de su congregación por videollamada, acompañada de sus hijos.
Dijo que mientras oraba entró en un sueño y alegó no saber lo que pasó con su hija Eliana Frías García.
Cuando fue cuestionada sobre quien cometió el hecho indicó: "será un espíritu maligno, algún demonio, porque yo soy una persona cristiana que le sirvo al señor, entonces yo sería incapaz de córtale la cabeza a mi niña".
En medio de sus declaraciones fue irrumpida por su abogado quien le solicitó que no hablara del hecho.
Tras casi dos horas en el tribunal, su abogado Aníbal García dijo que la audiencia se aplazó para el próximo martes 20 de agosto porque no ha recibido la acusación del Ministerio Público.
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Aplazan para el martes solicitud del Ministerio Público de medida de coerción en contra de la imputada, a la que acusa de asesinato porque, según el órgano acusador, cometió el crimen con asechanza.
Más sobre el caso
La información preliminar establece que el cuerpo de la niña fue encontrado decapitado en la residencia de García Cuello, ubicado en Hainamosa, Santo Domingo Este, donde vivía con sus su esposo y sus dos hijos.
Un vecino indicó que Gracia Cuello había llamado a su puerta diciendo que alguien había penetrado a su residencia con intenciones de robar.
El vecino identificado como Lenin Liranzo comentó que al ver el piso ensangrentado salió en busca de la persona, pero no dio con ella.
La primera teniente del Ejército fue detenido por la Policía Nacional y la presunta arma con la que se cometió el hecho fue encontrada en un terreno baldío detrás del residencial donde viven.