VIDEO | Desesperación por conato de incendio lleva a reclusos de La Victoria a forzar candados de sus celdas
Una brigada de bomberos ya está instalada de manera permanente en el recinto, aseguró el director de Prisiones
Las frágiles condiciones de la cárcel de La Victoria la han llevado a ser escenario de otro conato de incendio, que ha alarmado tanto a reclusos como a agentes policiales, tras cumplirse una semana del incendio que cobró la vida de 13 personas.
Anoche, algunos reclusos pasaron por un momento de desesperación luego que una de las casetas de la cárcel registrara un cortocircuito.
"Nos íbamos a morir casi, si no rompen el candado. Mira cómo es que están, todo el mundo rompiendo los candados", exclamó un imputado que grababa a otros ayudando a policías a forzar las puertas para que los presos pudieran abandonar el lugar.
Instalan una brigada permanente de bomberos
El director general de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC), Roberto Hernández Basilio, informó a Diario Libre que este conato fue rápidamente sofocado y que, pese al susto que vivieron los recluidos con el fallo eléctrico, no fue necesario trasladarlos a otros lugares debido al incidente.
Explicó que muchos de los reclusos se movilizaron desde otras áreas para ayudar a quienes estaban recluidos en la zona donde se dio el conato.
"Fue en una caseta que, por un asunto eléctrico en otra área se incendió anoche. Pero fue sofocado de inmediato. Ahí se estableció una unidad fija del Cuerpo de Bomberos y del COE (Centro de Operaciones de Emergencias); están ahí desde anoche", confirmó Hernández Basilio a este medio.
Dijo que estas brigadas estarán permanentes para dar asistencia a todo el recinto carcelario.
Asimismo, indicó que se han hecho algunas adaptaciones y mejoras en el nivel de voltaje de la cárcel, lo que ha generado algunos fallos en la distribución eléctrica. "Hay todo un equipo trabajando y todo un equipo de emergencia", reiteró.
Fallos a una semana de la tragedia
Estos fallos se dan a seis días de que se registrara un cortocircuito que desató un incendio que costó la vida de 13 personas (nueve de ellas aún sin poder ser identificadas por el nivel de quemaduras en su cuerpo), dejó a otras 11 heridas y afectó severamente las condiciones del recinto.
El siniestro del 18 de marzo, que tardó más de 11 horas en ser sofocado, hizo que las autoridades trasladaran 772 presos hacia otros recintos carcelarios en el transcurso de la semana.
La tragedia ha afligido a los familiares de los imputados, quienes han tenido dificultades para identificar a sus seres queridos, comunicarse con ellos o conocer en qué estado se encuentran.
Aunque el recinto habilitó un espacio para recibir a los dolientes y darles asistencia, las visitas a los reclusos para este domingo se encuentran suspendidas desde el martes, a fin de concluir el levantamiento de los escombros en las áreas afectadas y en el patio que comparten las celdas 3 y 4 de la cárcel.
Contactan familiares y aprestan conocimiento de casos
Con la asistencia de la DGSPC, cientos de personas han logrado contactar a su familiares recluidos en áreas más seguras de la Penitenciaría Nacional de La Victoria y en diferentes centros de corrección y rehabilitación, luego del incendio.
Hernández Basilio explicó que empleados de esa institución continúan trabajando en el protocolo y la mesa de ayuda establecida con esos fines, mediante la cual, dijo que "cientos de familias han logrado identificar sanos y salvos a sus parientes trasladados de áreas luego del siniestro".
"Para identificar a sus parientes, las familias, acompañadas de funcionarios del sistema penitenciario en el centro de La Victoria recorren las diferentes áreas del centro hasta encontrar a sus privados de libertad, manifestando una gran alegría por ver con vida a sus seres queridos", agregó.
Según el registro de la DGSPC, hasta este sábado han sido asistidas unas 243 familias de privados de libertad que han sido distribuidos en las diferentes áreas del centro penitenciario para ofrecer asistencia sobre los traslados dentro del penal y a otros centros.
En cuanto a la asistencia a las audiencias, el departamento jurídico de la DGSPC identificó a quienes tienen el conocimiento de sus casos pendientes, a fin de evitar que los privados de libertad que han sido trasladados pierdan la oportunidad de que se conozcan sus expedientes en un tiempo oportuno, según el requerimiento de los tribunales. Para esto, creó un chat de seguimiento.
De acuerdo a la entidad, a su llegada a otros Centros de Corrección y Rehabilitación (CCR), los internos de la cárcel de La Victoria que residían en las celdas 3, 4, 5, 6, 7 y 8 de los patios afectados por el incendio, fueron llevados a las áreas de ducha, recibieron ropa limpia y fueron atendidos por barberos y por un personal de salud que les realiza una evaluación.
Los internos también recibieron una charla en la cual se les explicó sus derechos y sus deberes, según lo establece la Ley 113-21, sobre Régimen Penitenciario.
Movimiento de reclusos
Mediante un comunicado de prensa, la DGSPC informó que, hasta este sábado, han sido trasladados a centros de corrección y rehabilitación como el CCR El Pinito, La Vega, 294 privados de libertad; al CCR Vista al Valle, de San Francisco de Macorís, 98; al CCR Anamuya, Higüey, 175; al CCR Cucama, La Romana, 62; al CCR San Pedro de Macorís, 23, al CCRA Haras Nacionales, 12; al CCR Elías Piña, 72, y al CCR Batey Bienvenido, 36.
En tanto, las brigadas pertenecientes a la Dirección de Medio Libre, integrada por privados de libertad que guardan prisión en La Victoria, continúan realizando labores de limpieza en la zona afectada a fin de restablecer, lo más pronto posible, las condiciones en que ha quedado el recinto luego del incendio.
El pasado viernes la procuradora general Miriam Germán Brito manifestó que por las condiciones técnicas que presenta, tras el incendio, el penal La Victoria ya no puede recibir nuevos ingresos de privados de libertad.
En ese sentido, solicitó a los jueces de las jurisdicciones afectadas que, en caso de que se imponga la prisión preventiva como medida de coerción, su cumplimiento se disponga en otro centro penitenciario.