VIDEO | Anyeris, una de las hermanitas atropelladas en San Luis, soñaba con ser maestra
Las dos niñas murieron junto a su tío al ser atropelladas por un vehículo conducido por un menor de edad
El padre, Engel de la Cruz, formalizó la querella en la oficina de Digesett
¡Mami, ven, vamos a ponernos a leer, que quiero ser maestra!", esas son las palabras que retumban en la memoria de Leidy Ventura al recordar a su hija Anyeris de la Cruz, de ocho años, quien junto a su hermana Yenderis de la Cruz, de tres años, su perrita y su tío Adolfo Cáceres, fallecieron tras ser embestidos la noche del sábado por un conductor menor de edad.
El joven transitaba a alta velocidad en un carro Honda Civic por la calle Principal del sector El Establo, en San Luis, Santo Domingo Este.
En la humilde casita de madera, con techo de zinc y dividida con vistosas cortinas de tela, todavía se observan algunos juguetes de las niñas, incluyendo una bicicleta rosada, cerca de los blocks sueltos y la verja aplastada en la entrada de la casa número 8, de la referida calle.
Ventura, madre de las occisas, lloraba desconsolada, recordando como Anyeris disfrutaba al leer el libro Nacho, porque su sueño era ser profesora.
"Tan solo ocho años, una niña ejemplar. Mi niña era súper con sus calificaciones... En la iglesia danzaba y adoraba. Mi niña era adoradora. La chiquita era bailarina", dijo entre sollozos.
"Llora, porque yo sé que ese dolor no es fácil", le dijo su hermano, Alexis Ventura, mientras se fundían en un fuerte abrazo.
Alexis comentó que lo que más extrañará es el momento cuando se saludaban y las niñas le decían "¡mi tío lindo, mi tío bello!, así como los fines de semana cuando compartían en la piscina de su casa.
Compañeros solidarios
Una treintena de niños de la Escuela Primaria Isabel Segura, donde Anyeris cursaba el tercero de primaria, visitaron la mañana de este lunes la vivienda donde ocurrió el trágico hecho, junto a maestras y parte del cuerpo directivo del plantel en señal de apoyo y solidaridad con la familia De la Cruz Ventura.
Eridania Rosario, directora del centro educativo, calificó a la niña como una "líder" y le contó a la madre que antes de iniciar la jornada educativa le dedicaron un minuto de silencio y colocaron la bandera de la escuela a media asta.
"A su cortita edad, dejó huellas en sus compañeros... Ella está demasiado bien, en un mundo donde no hay maldad, donde todo es paz", afirmó Rosario tratando de consolar a Leidy.
Sin poder contener las lágrimas, Kenya Matos, maestra del tercer grado, aseguró que Anyeris era muy disciplinada y estaba en proceso de su evaluación diagnóstica.
Su recuerdo más marcado fue cuando la semana pasada la niña estaba tarareando una canción y todos sus compañeritos se unieron.
"Fue como una despedida", describió Matos.
Calle estrecha
Vecinos alegan que, tras la construcción de un proyecto habitacional justo en frente de donde ocurrió el accidente, la calle quedó más estrecha y solicitan la colocación de dos policías acostados.
"Ese joven andaba muy duro, él por poquito me mata. Yo venía en una pasola y tuve que meterme alante de una yipeta para que no me matara. Es un menor de edad, no anda con licencia, no tiene que andar conduciendo y más en carro prestado", testificó Stefany Severino, una vecina.
Padre de las niñas levanta el acta
Engel de la Cruz, padre de las menores, procedió a colocar la querella formal en la oficina de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) y pidió que el caso no quede impune.
"Él estaba bebiendo. Las autoridades sabrán lo que van a hacer con el menor. Él está preso. Acabo de venir de levantar el acta. No sé si estaremos mañana de Fiscalía", dijo.
Pidió "que se haga justicia". A sus hijas las describió como "dos niñas alegres, inteligentes, dos niñas excelentes".
Este martes será el velatorio del tío Adolfo en Cristo Rey, aplazado porque algunos de sus hijos residen en el extranjero y solicitaron tiempo para viajar al país.