Familiares de mujer asesinada por su esposo en Alma Rosa dicen que la pareja tenía problemas hace años
Afirman que les habían aconsejado separarse porque temían que una de sus peleas concluyera en un hecho de sangre
Familiares de la mujer asesinada a tiros la madrugada de este sábado en Alma Rosa II, Santo Domingo Este, por su esposo, un sargento de la Policía Nacional que también hirió a su suegra y se suicidó de la misma forma, dicen que la pareja confrontó muchos problemas desde hace años y les habían aconsejado separarse.
José Lantigua, padre de Elizabeth Lantigua Aquino, de 36 años, ultimada por el sargento mayor de la Policía Nacional Anthony Eudy Reyes Cáceres, de 38 años, y esposo de Ceferina Pascuala, de 70, quien se encuentra en estado de gravedad por las heridas de bala que le fueron propinadas, dijo que su yerno era muy celoso, por lo que discutía frecuentemente con su hija.
"Ellos estaban viviendo una vida un poco desorganizada. No había respeto, no se respetaban ambos; entonces cuando no hay respeto en un hogar llega esa situación. Entonces, yo le decía a mi hija: mi hija, si tú no puedes vivir con ese señor, tú lo dejas, pero ella parece que no tuvo nunca esa decisión”, expresó José, al afirmar que al parecer Elizabeth tenía miedo de alejarse.
Dijo que la pareja se unió siendo muy jóvenes y habían procreado cuatro hijos, con edades de 14, 13, 11 y 8 años, el mayor de los cuales presenció el suceso.
Las constantes peleas y discusiones de los esposos son corroboradas por vecinos de ambos quienes dicen que algunas veces tuvieron que intervenir para calmar la situación en la vivienda ubicada en la calle 19 de Alma Rosa, pero anoche, por haber disparos, no acudieron.
En tanto que Yudelka Lantigua, sobrina de Elizabeth, dice que esta le decía que con frecuencia recibía amenazas de muerte de parte de Eudy y le había dicho que denunciara la situación ante las autoridades.
Los hechos
Yudelka Lantigua cuenta que la noche de este viernes Elizabeth había ido a casa de sus padres -quienes residen a varias cuadras- a cenar con ellos, y Eudy comenzó a llamarla insistentemente, al parecer pensando que estaba en otro lugar.
Relata que ella también se encontraba en la vivienda y decidió acompañarla hasta su casa junto a Ceferina, a donde llegaron pasadas las 11 de la noche, encontrando al alistado policial enfurecido, quien comenzó a disparar contra estos luego de haber discutido unos instantes.
Dice que salvó su vida de milagro, porque pensó que ella o su hija -la cual cargaba en brazos- sería alcanzada por las balas, pero logró retroceder de la entrada de un callejón por el que se accede a la residencia de las víctimas y refugiarse en otra, junto a su hija pequeña.
Piden ayuda
José Lantigua, abuelo de los niños que resultaron huérfanos, pidió a las autoridades acudir en su ayuda, ya que han quedado momentáneamente bajo su cuidado y no posee los recursos suficientes para hacerse cargo de sus necesidades.
Ceferina, sobreviviente de la balacera, se encuentra recibiendo atenciones en el Hospital Doctor Dario Contreras, donde sus familiares dicen que se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos, se les ha dicho que requieren sangre para transfundirla y que su estado es de gravedad.
Los cuerpos
Los dos cadáveres aún permanecían la tarde de este sábado en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses de la República Dominicana (Inacif).