VacúnateRD se reanima con inyección de 500,000 dosis que llegaron ayer desde China
Salud Pública llama a mayores de 68 años a jornada vacunación este jueves y viernes
Desde hoy, en el país se vuelve a aplicar primera dosis de vacunas a personas mayores de 68 años, una reanimación del Plan Nacional de Vacunación contra COVID-19 (VacúnateRD) gracias a la llegada de 500,000 dosis procedentes de China.
Desde hace varias semanas, las autoridades de Salud solo estaban completando el esquema a los que se aplicaron la primera dosis, debido a la poca disponibilidad de las vacunas, pero este miércoles, el ministro de Salud Pública, Daniel Rivera, llamó a todos los mayores de 68 años para que acudan este jueves y viernes a una jornada de vacunación masiva.
Indicó que todavía hay un margen de esta población que queda pendiente de vacunar y que son, precisamente, los pacientes que más se complican cuando se infectan con el coronavirus. A ellos, les estarían administrando la primera dosis, mientras continúan completando una segunda a la población que ya se le cumplió el tiempo que debe pasar entre la primera y segunda dosis.
Sin embargo, se desconoce la cantidad de población que pueden alcanzar con las vacunas recién llegadas de China. Con las nuevas 500,000 dosis, Dominicana llega a un total de 2,450,200 que, a razón de dos dosis, alcanzarían para inocular a 1,225,100 personas. La primera fase de VacúnateRD busca alcanzar a 1.5 millones de personas, incluidos mayores de 70 años, personal sanitario, docentes y militares.
Del total de las vacunas 2,268,000 son de la china Sinovac, seguido de 91,200 de la AstraZeneca adquiridas mediante el mecanismo Covax, otras 50,000 dosis de Covishield y una cantidad similar de la Sinopharm, también procedente China.
En sus declaraciones de ayer, el ministro Rivera recordó los retrasos de entrega de más de 20 millones de dosis contratados con distintas farmacéuticas.
En su participación en la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado, el presidente Abinader criticó que en el proceso de distribución de las vacunas contra el COVID-19, los países más desarrollados han adoptado políticas de acaparamiento que niegan el acceso a ellas de los países de bajos y medianos ingresos.
“Que quede bien claro. No estamos abogando por ayuda humanitaria o por fondos de beneficencia. Lo que estamos planteando es una alianza para el desarrollo que nos permita transitar como región a un nuevo modelo productivo y redistributivo”, dijo el mandatario.