Promese relanza programa social para reducir muertes por infarto
El medicamento estará en los hospitales Salvador Bienvenido Gautier, el de las Fuerzas Armadas, el Moscoso Puello y el José María Cabral y Báez
El programa de Medicamentos Esenciales y Central de Apoyo Logístico (Promese/Cal) informó este jueves del relanzamiento del Programa Nacional de Reperfusión Coronaria (Pronarcor), por el cual se provee de tratamiento a los pacientes que llegan a las emergencias de los hospitales, con síntomas de infarto agudo al miocardio en las primeras 6 horas de evolución.
El subdirector de Promese/Cal y quien está a cargo de los programas sociales de la entidad, Luis Lizardo, aseguró que con el relanzamiento se disminuirán los casos de fallecimientos asociados a la condición.
“En República Dominicana se producen 15,000 muertes al año por esta causa. Este medicamento con el que estamos relanzando el programa se llama Reteplase y lo que realiza es diluir los trombos que tapan las arterias coronarias”, explicó Lizardo.
Indicó que el medicamento es de aplicación inmediata y salva la vida del paciente reduciendo la posibilidad de muerte de 30% a 2%.
Informó que el programa tiene un costo anual de $RD12 millones y que cada una de las ampollas cuesta 55,000 pesos.
Elogió la intervención del director de la entidad, Adolfo Pérez, de quien dijo ha declarado que la vida humana es lo más importante en consonancia con la prioridad que el gobierno del presidente Luis Abinader ha dado a la salud de los dominicanos.
El funcionario especificó que por el momento solo se realizará en los hospitales Salvador Bienvenido Gautier, el General de las Fuerzas Armadas, el Hospital Francisco Moscoso Puello, en el Distrito Nacional, y el José María Cabral y Báez, en Santiago.
“Nosotros quisiéramos llegar a más hospitales, pero debido a la gran inversión económica, Promese/Cal no puede asumir todo lo que queremos, por lo que esperamos que en lo adelante algunas instituciones o entidades sin fines de lucro se sumen al programa para así poder extender su alcance”, dijo Lizardo.
Resaltó que como se trata de un medicamento utilizado en situaciones de emergencia, la dispensación se realiza a los centros hospitalarios de tal manera que estos puedan contar con el medicamento y salvar la vida del paciente.
Explicó, además, que los infartos son comunes en personas que superan los 60 años de edad y dijo que se ha registrado que hay cierta comorbilidad entre diabéticos e hipertensos, también los obesos y los usuarios de esteroides.