El dengue se frena con fondos y con integración
Ayer representantes de diferentes instancias hicieron un panel sobre el tema
La epidemia de dengue se debe enfrentar con un programa básico de saneamiento medioambiental, jornadas de movilizaciones sociales, educación permanente a la población y con un presupuesto para el Ministerio de Salud. El doctor Pedro Sing dijo que es necesario que la población entienda que en momento determinado tiene que haber una movilización social, ya la gente sabe que no se le puede dar aspirina al febril.
Para el infectólogo Jesús Feris Iglesias la noticia no debe ser nada más contar muertos o contar números de casos, sino la movilización para la prevención de la epidemia y la única forma de poder disminuir y acabar con ella.
Sing y Feris Iglesias expresaron su parecer junto a los médicos José Manuel Puello y Winston Genao, así como también, de Manuel Cabral, del Ministerio de Energía y Minas, Elizabeth Sánchez, de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd) y Rafael Pérez, del Ayuntamiento del Distrito Nacional, durante un panel que organizó la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
El panel inició con Puello, representante del Ministerio de Salud Pública, quien dijo que hasta la fecha tienen 4,907 casos de dengue registrados, incluyendo 8 defunciones y que 19 municipios están en el rango de alto riesgo de la infestación del dengue.
Dijo que el Ministerio desarrolla una estrategia de lucha contra el vector y que ya han visitado 313,505 viviendas en todo el país y eliminado 180,643 criaderos de mosquitos.
A Puello le siguió Cabral, quien se refirió a un programa de manejo de plagas con una técnica de insecto estéril, pero que se utiliza mayormente para combatir la mosquita y que podría ser utilizado la lucha contra el dengue.
Genao, de su lado, trabaja en el Ayuntamiento del distrito Nacional y dijo que el problema principal en la propagación del dengue es la falta de educación y el problema de drenaje pluvial.
Sobre el particular Pérez, también del cabildo, dijo que la ciudad tiene 94 kilómetros cuadrados, 4,800 kilómetros de calles y 150 de alcantarillados pluviales y que un alto porcentaje del sistema carece de recolectores y filtrantes, lo que hace que se acumule agua y que ésta se convierta en un reservorio del mosquito Aedes aegypti, que transmite el dengue.