Congestión, posible dengue y traumas, motivos de visita al Robert Reid este jueves de Corpus Christi
Durante la visita de Diario Libre, el área de Emergencia mantuvo un flujo activo de pacientes
La Emergencia del Hospital Pediátrico Robert Reid Cabral se mantuvo activa durante este feriado por Corpus Christi.
Este jueves, algunos padres solicitaban asistencia médica para sus pequeños afectados por virus respiratorios propios de la época.
Tal es el caso de Elquídea, residente en Quita Sueño, San Cristóbal, madre de una niña de un año de edad a quien tuvieron que nebulizar a causa de una fuerte congestión.
"La atendieron rápido, le recetaron una bombita y que pase por consulta", dijo la progenitora.
Una situación similar atraviesa Remy, un nacional de origen haitiano, residente en Herrera, municipio Santo Domingo Oeste, quien, junto a su esposa, llegó al Robert Reid buscando bajarle la fiebre que desde hace seis días presenta su pequeña.
"Tiene fiebre y gripe, ya le dieron acetaminofén y que vaya a consulta", comentó.
Posible dengue
Desde Yamasá, Laura Reyes llegó con su bebé de nueve meses en brazos.
"Tiene una fiebre que no se le ha podido bajar", resaltó con gran preocupación.
La niña estuvo interna desde el martes en su pueblo natal y al no notar mejoría la trasladaron a la capital. El médico le dio un diagnóstico de posible dengue pero al llegar al Robert Reid y hacerle el hemograma, le dijeron que, clínicamente, no coincidía.
"No entiendo nada", comentó Reyes mientras esperaba que a la bebé le "encontraran una vena para poder canalizarla".
Abscesos y traumas
Fuera de la puerta de Emergencia, Faustino esperaba noticias de su hija de dos años, quien se encontraba dentro junto a su esposa, recibiendo atenciones fruto de un trauma encéfalocraneano.
"La niña se cayó y tiene un golpe muy grande en la cabeza. Le mandaron a hacer unos estudios porque fuimos a Barquesillo (el hospital local de Haina) y ni una plaquita me le hicieron", se quejó el padre.
Por su lado, Natali Ramírez acompañaba a su hija Amanda, de un año y ocho meses, por una hinchazón (posible absceso) en la mandíbula, como parte de su proceso de dentición.
"La traje con dolor en los molares. Están trabajando muy bien y atendiendo a los niños rápido", señaló Natali a su salida del centro asistencial.