Preocupación en el sector de la construcción por el plan de Migración
El presidente de la Confederación Dominicana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas de la Construcción (Copymecom), Eliseo Cristopher Ramírez, aseguró que "sin los haitianos, se paraliza", refiriéndose al sector que representa
Casi una semana después del inicio del operativo de repatriación de migrantes, los sectores como la construcción se están viendo afectados por las detenciones y el miedo de los haitianos a salir a la calle.
En un recorrido de un equipo de Diario Libre por varias obras del Distrito Nacional, los mismos ingenieros y responsables denunciaron no solo que Migración se atrinchera a las salidas, sino que también detienen en más de una ocasión a las mismas personas, e incluso que se llevan a trabajadores con los papeles en orden.
El presidente de la Confederación Dominicana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas de la Construcción (Copymecom), Eliseo Cristopher Ramírez, aseguró que "sin los haitianos, se paraliza", refiriéndose al sector que representa.
Ramírez explicó que, en su posición de empresario, el sector de la construcción siempre sirvió de acogida para la migración haitiana. Ahora, con el plan migratorio del gobierno que ha intensificado los operativos y pretende deportar hasta a 10,000 mil haitianos a la semana, hace un llamado a "dominicanizar" la mano de obra a través de un plan de incentivos.
Asegura que hay un 85 % de empleo informal en las obras. "Hacemos un llamado a la sociedad para buscar soluciones en conjunto", dijo el presidente de la Copymecon.
Desde la confederación confirmaron que donde más se nota la ausencia de personal es en el este del país.
Durante el recorrido del equipo de Diario Libre por las construcciones en el Distrito Nacional, los ingenieros y dirigentes de las obras denunciaron que su número de trabajadores se ha reducido. Esto, explicaron, no solo se debe a las detenciones por parte de las autoridades, sino que muchos deciden no salir de sus casas por miedo.
En el caso de una construcción, aseguraron que el plazo de entrega se estaría retrasando de uno a dos años más tarde de lo previsto. El ingeniero a cargo manifestó que antes del inicio del operativo tenía más de 100 obreros, ahora no llega ni a esa cifra.
En otra construcción, el jefe expuso que los camiones de la Dirección General de Migración aparecen por las mañanas y se llevan a los empleados antes de entrar. Además, les ocurrió en varias ocasiones que las autoridades detuvieron más de una vez a la misma persona con estatus regular.
Los barrios también están vacíos
Después de que las primeras cuatro jornadas del operativo de repatriación se destacaran por su intensidad, en los últimos dos días predomina la inquietud e indecisión de salir a las calles por parte de la comunidad haitiana que residente en la capital dominicana.
Aunque la Dirección General de Migración comunicó este martes que desde el 1 de octubre hasta el domingo 6 se "interdictaron" más nueve mil migrantes en condición irregular, el ambiente árido en los barrios, las construcciones, e incluso en la entrada del Centro de Acogida Vacacional de Haina, son un ejemplo de la decadencia en los últimos días.
El operativo de la Dirección General de Migración (DGM) que quiere alcanzar la repatriación de 10,000 haitianos a la semana iniciado por el Gobierno se encuentra en un aparente estatus tranquilo.
Misma situación en Casa de Campo
En Casa de Campo, en la provincia oriental de La Romana, ocurre una situación similar, donde el número de haitianos que entran a trabajar se ha reducido. Un equipo de Diario Libre visitó la zona y le confirmaron que Migración espera a los migrantes en su ruta de trabajo para detenerlos y procesarlos.
Por ello, los que tienen un estatus irregular, se han visto obligados a cambiar sus rutas para llegar al lugar de trabajo. Ellos mismos afirmaron que no quieren ser atrapados porque entienden que sufrirían maltrato.