Madre de Anibel González pide ayuda para criar a sus nietas
Mercedes Ureña, de 60 años, narró la difícil situación que atraviesa tras el feminicidio de su hija
Mercedes Ureña, madre de la abogada Anibel González, quien fue asesinada a tiros por su pareja Yasmil Fernández delante de sus tres hijas en 2019, pidió ayuda para poder criar a sus tres nietas.
Durante los 12 años de matrimonio con su agresor, González dio a luz a tres niñas, que ahora tienen 15, 12 y 7 años y están bajo el cuidado de su abuela.
Ureña ha estado a cargo de las niñas desde hace cuatro años, tras la muerte de su hija, el 31 de agosto de 2019.
"Tengo 60 años, así que ser madre de nuevo a mi edad no es fácil. Tengo que cuidar de tres niñas indefensas, y la mayor está enferma, al igual que la más pequeña", narró la señora en una entrevista en el programa “Desclasificado con Addis Burgos”, que se transmite por CDN, Canal 37.
Además, indicó que su nieta mayor está recibiendo tratamiento psicológico.
La niña de siete años, la menor de las tres, padece diabetes tipo 1, por lo que necesita medicación hasta tres veces al día para mantenerla bajo control.
"Casi todo el mundo sufre de azúcar, pero el problema de ella es que padece diabetes tipo 1 y eso hace que sea muy difícil para mí", contó.
Precisó que se le debe administrar insulina hasta cinco veces al día.
“Tengo que estar constantemente llevando a la mayor y a la menor, haciéndoles análisis, estudios, y administrando la insulina temprano en la mañana”, manifestó a la periodista Addys Burgos.
Dijo que a pesar de las dificultades que enfrenta, sus nietas son la principal razón por la que sigue adelante.
“Es muy difícil para mí, solo Dios me da la fuerza para mantenerme en pie. Ellas son niñas muy buenas, valientes y fuertes, y eso también me ayuda mucho”, relató.
Describió el dolor que todavía siente por la pérdida de su hija, a pesar del tiempo que ha transcurrido desde la madrugada de aquel sábado de agosto de 2019.
"Nada fácil para mí aceptar que perdí a mi hija, sino que me dejó tres niñas huérfanas, es algo que solamente... es un dolor que nadie entiende", aseveró.