Sin lavatorio de pies, celebran misa de la cena del Señor en la basílica de Higüey
La celebración fue efectuada por el obispo, monseñor Jesús Castro Marte
La misa de la institución de la eucaristía fue realizada hoy en la basílica Nuestra Señora de La Altagracia, en Higüey, provincia La Altagracia, sin el lavatorio de los pies como es tradición en la Semana Santa.
El Jueves Santo marca la ocasión en que se instituye la celebración eucarística.
Dicha celebración fue efectuada por el obispo monseñor Jesús Castro Marte, quien dijo que el lavatorio de los pies no se realizaría por motivo de la pandemia del COVID-19.
Durante la eucaristía, recordó los puntos principales que le dan sentido a la celebración del Jueves Santo, que son la institución de la eucaristía, del sacerdocio y el mandamiento del amor.
El religioso expuso que otro signo que muestra Jesús en este día es la institución de la caridad.
Aseguró que Jesucristo, en sus palabras, pide que hagan eso en memoria suya.
En tal sentido, argumentó que es bueno ponerse en actitud de agradecimiento a Dios, porque en su hijo Jesucristo manifiesta su proyecto realizado con amor y sabiduría.
Aseguró que con la "Institución del sacerdocio" se produce la actualización del Misterio Pascual, porque la eucaristía actualiza y renueva la acción de Dios con su pueblo.
Apuntó que el amor que entrega Jesús este día lo convierte en gesto de servicio, lavando los pies a sus discípulos, enseñando cuál debe ser la actitud de servicio a favor del reino de Dios, que es un reino de paz, de justicia y de amor.
En otro orden, citó que muchas veces las personas están ciegas fruto del apego a lo material, a la vanidad o por la soberbia, lo que les impide ver al hermano pobre que está a su lado, que tiene un rostro.
La celebración, finalizó con una procesión dentro del templo, donde llevaron a Jesús eucaristía a la capilla de la basílica, donde permanecerá hasta el domingo de resurrección.
De igual manera, no se dio la acostumbrada despedida por parte del celebrante, ya que, esta celebración termina el próximo domingo con la resurrección de Jesucristo.