El centro de la Temporada ciclónica es el más catastrófico para República Dominicana
La Temporada ciclónica en el Caribe y el Atlántico inicia el primero de junio de cada año y concluye el 30 de noviembre, conforme tiene establecido la Organización Meteorológica Mundial, totalizando seis meses en los que se está a la expectativa de la formación y evolución de fenómenos atmosféricos que pudieran hacer estragos en los países que se encuentran en su posible trayectoria.
Sin embargo para la República Dominicana el periodo histórico en que hay mayores probabilidades de sufrir los embates de cualquiera de estos fenómenos son los meses de agosto y septiembre, justo al centro de la temporada.
En agosto y septiembre han ocurrido 15 de los 18 huracanes que han afectado a República Dominicana en los últimos 90 años, incluidos San Zenón, Inés, David y George.
En tanto que en octubre han ocurrido los huracanes Katie de categoría uno, ocurrido el día 16 en 1955 y Sandy de categoría dos el día 23 de 2012.
De igual forma 18 de las 30 tormentas tropicales que han ocurrido en las últimas desde 1930 hacia acá en el país han sido en los meses de agosto y septiembre.
En este caso e entre las excepciones se encuentran las recordadas tormentas tropicales Noel, el 27 de octubre de 2007 y Olga, el 11 de diciembre del mismo año, esta última fuera de la temporada regular de huracanes.
Para explicar el fenómeno el ex director de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) Ingeniero meteorólogo, Antonio Cocco Quezada, dice que a pesar de haber una serie de factores muy variados en la naturaleza que inciden en ese comportamiento, entre los principales esta la oscilación de un sistema conocido como el anticiclón de las Azores o el anticiclón de Bermudas que se establece en el Atlántico Norte.
“La Isla de Santo Domingo esta alrededor de la circulación de un sistema meteorológico que es el anticiclón de las bermudas del Atlántico Norte que gobierna el movimiento de los huracanes. Se forman al Sur de él”, afirma Quezada.
Dice que nos llegan porque “la corriente conductora naturalmente de esos huracanes tiende a ser Este Oeste. Se forman cerca de África. Se pegan del anticiclón del Atlántico y entonces hacen su rumbo hacia el Oeste (Las Antillas), y ahí estamos nosotros en el medio”, explica.
Sostiene que ese anticiclón se establece “como una pared” de alta presión que no permite subir a las bajas presiones, por lo que las formaciones que se producen se esfuman antes de que puedan llegar al Caribe debido a que su trayectoria es cambiada por este sistema que a su vez también cambia de posición con relación siguiendo al sol subiendo al norte en verano y bajando en el invierno atendiendo a la inclinación del eje de la tierra.
“Ahora mismo hay 165 años de trayectoria de ciclones tropicales en el Atlántico, y nunca han tocado a República Dominicana del primero de junio al 10 de julio. Para nosotros yo digo que nuestra temporada ciclónica no inicia el primero de junio, comienza el 10 de julio”, consideró el experto.
Señala también que nuestra posición geográfica nos ubica al centro de la trayectoria de los ciclones tropicales. “Si tu coges muchas trayectorias y haces la media aritmética de ellas y de esos puntos esos puntos, la trayectoria central promedio cae sobre nosotros”, explica Quezada.
Agrega que las circulaciones ambientales en la región del Caribe y el Atlántico Norte también son influenciada por el viento alisio que nos llega que en nuestro caso entra húmedo todo el año es responsable de que ocurran lluvias.
Concluye con que esas variables inciden en que se produzcan las altas temperaturas en las aguas del mar para que haya evaporación en estas y la formación de más nubes, condiciones que son favorables a la formación de huracanes.
Temporada activa
Previo al inicio de la actual Temporada ciclónica la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados unidos la catalogo como una de las más activas de los últimos años, proyectando la formación de entre 13 y 49 tormentas nombradas cuando de manera regular se espera la formación de 12 de ellas.
De igual forma el organismo tiene establecido que en una Temporada ciclónica promedio seis de esas tormentas se convierten en huracanes y al menos tres alcanzan escalas de entre tres y cinco, esta ultima la más alta en la escala Saffir-Simpson con la que se mide su intensidad.
Sin embargo para esta temporada se espera que entre seis y 10 tormentas se conviertan en huracanes y de estos entre tres y seis lleguen a categorías entre tres y cinco.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica contempla que las probabilidades de que esta Temporada ciclónica sea más activa de lo normal son de un 60 por ciento, 30 por ciento de que sea casi normal y solo un 10 por ciento de que sea menos activa que lo normal.
Los nombres de tormentas asignados para esta Temporada ciclónica son: Arthur, Bertha, Cristóbal, Dolly, Edouard, Fay, Gonzalo, Hanna, Isaias, Josephine, Kyle, Laura, Marco, Nana, Omar, Paulette, Rene, Sally, Teddy, Vicky y Wilfred.
La directora de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet), Gloria Ceballos dijo que al inicio de esta temporada estábamos en un periodo neutro, en el que no incidían los fenómenos climáticos del Niño, ni de La Niña, pero que se espera que esta última se manifieste entre agosto y septiembre.
“Vamos a pasar de este periodo neutro que nos daría una temporada ciclónica normal a el fenómeno La Niña, que es el enfriamiento de las aguas del Pacífico Ecuatorial, y esto favorece a que la temporada ciclónica en el Atlántico Norte sea más activas”, sostuvo Ceballos.
En relación a la posibilidad de que República Dominicana pueda resultar afectada por una de esas tormentas o huracanes, recordó que “en el Caribe siempre debemos estar preparados para ser impactados, pues estamos en la trayectoria que describen”, advirtió.
La última temporada con actividad considerada con actividad por encima del promedio es la de 2017 en la que se formaron los huracanes de categoría superior a tres, Harvey, Irma y María.