DOCALSA afirma que sus operaciones no afectan las Cuevas del Pomier
Reforestarán área y la operación se aleja del área protegida
Luego de que la Fundación Cuevas del Pomier manifestara públicamente su preocupación por una voladura (explosión controlada) en las cercanías de la Reserva Antropológica, la empresa DOCALSA llegó a un acuerdo con la Dirección Provincial de Medio Ambiente, por las inquietudes de los comunitarios, aunque estos trabajos ya estaban programados y coordinados con las autoridades ambientales.
DOCALSA posee una concesión desde 1984, para la extracción de cal y agregados en El Pomier, provincia San Cristóbal, la cual fue fundada en 1927 por el señor José María Aponte. En el año 2000 se funda DOCALSA y en el 2002 se relanza con una nueva estructura accionaria. A la actual concesión le resta una vigencia de 40 años.
Diario Libre visitó las instalaciones de DOCALSA en San Cristóbal y conversó con sus ejecutivos sobre las inquietudes que surgieron en las últimas semanas.
Según DOCALSA todas sus operaciones cumplen a cabalidad con los protocolos establecidos por las autoridades. En el caso de las perforaciones de un área determinada, es evaluada y aprobada por la Dirección Provincial o por la Administración de la Reserva Antropológica, a través de una comunicación por escrito. “En ninguna circunstancia, cuando se trata de procesos operativos, la empresa actúa de forma independiente o unilateral, sino que coordina de forma previa y se maneja con las autoridades de la zona con una actitud responsable de cooperación y explicación de los alcances, objetivos y finalidad de nuestras actividades”, explicaron.
Cuevas del Pomier, al límite de su conservación
Además detallan que las operaciones de perforación en cuestión, tienen como propósito dar cumplimiento al programa de cierre definitivo de esa área minada, especialmente en taludes previos a la Ley 64-00 de Medio Ambiente y la Ley sectorial 202-04 de Áreas Protegidas. Precisaron que esa área minada se está preparando para la adecuación de taludes verticales y la posterior reforestación de las zonas impactadas. Explican que sin este cambio de paredes verticales a paredes con 45 grados de inclinación, es imposible de ejecutar la reforestación y con esto evitar futuros derrumbes que puedan afectar a los comunitarios, trabajadores y maquinara, tal como lo entienden las diferentes comisiones institucionales que visitaron la zona como son el Ministerio de Energía y Minas, Dirección General de Minería y el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Explotación en zona de amortiguamiento
Sobre la explotación dentro de los 300 de zona de amortiguamiento, la empresa aclara: “Efectivamente, existe un Acuerdo firmado entre las empresas de la zona y las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente (2009), específicamente el Viceministerio de Áreas Protegidas, donde se establecieron las zonas de amortiguamiento que se aplicarían a cada una de estas empresas; sin embargo, tratándose de una minería que inició en 1964 (mucho antes de la Ley 64-00), es de entender que se tengan áreas de recuperación dentro de estos límites, los mismos que son objeto de interés únicamente para fines de adecuación y reforestación, según el Plan de Cierre depositado en el Ministerio correspondiente”.
En el mapa se puede observar la zona en preparación para cierre definitivo en azul, que es la más cercana al área protegida y zonas reforestadas en verde.
Sobre las denuncias y preocupaciones que las voladuras pudieran causar a las cuevas, explican que usan tecnología de punta, que consiste en el uso de micro-retardos y el uso de un software especializado. Con esto pueden controlar los efectos de vibración y además colocan sismógrafos en los puntos de mayor vulnerabilidad y/o cercanía a las cuevas de la reserva. Luego de que finalizan una operación entregan un reporte detallado a las autoridades correspondientes que incluye los resultados de los sismógrafos. Diario Libre obtuvo una copia de uno de estos reportes entregados al Ministerio de Medio Ambiente donde se detalla el procedimiento y es acompañado de fotografías y la lectura de los sismógrafos, donde se puede observar que las vibraciones están muy por debajo de las que pudieran causar algún tipo de daño a las cavernas, según estándares internacionales.
Cuevas del Pomier, al límite de su conservación
Francisco Aponte, miembro del consejo de administración de DOCALSA, aclara que en ningún momento se ha dinamitado ni dañado la zona de restricción, ni han hecho perforaciones. Además, explica que DOCALSA tiene una historia de más de 90 años cumpliendo con los requerimientos de las autoridades.
Sobre las denuncias
La empresa minera considera infundadas las declaraciones contra la empresa. “No solamente son infundadas, sino que provienen de personas que saben y han estado presentes en reuniones que se han realizado... Están completamente edificados sobre qué era lo que estábamos haciendo allí”, explicó Aponte.
DOCALSA ha encargado a su departamento legal que investigue si existe algún interés de afectar la reputación de la empresa para luego proceder legalmente.
“La desinformación y el desconocimiento de causa, especialmente de los planes de cierre y recuperación que tiene la empresa, pueden ser tratados como la causa principal de las denuncias presentadas de forma repentina, ante actividades mineras que tienen décadas en desarrollo”, concluyeron.