Matan investigador que estaba a “punto de hacer hallazgo” significativo del COVID-19
La policía descarta que su asesinato tenga que ver con sus investigaciones
Un profesor e investigador de la Universidad de Pittsburgh, Estados Unidos, asesinado el pasado sábado de varios disparos en su residencia en Pensilvania, según sus compañeros, “estaba a punto de hacer hallazgos muy significativos para comprender los mecanismos celulares” ocultos en la infección del COVID-19.
Aunque se ha apuntado a la conspiración, la policía de Elm Court, en Pensilvania, lo ha descartado.
La policía cita como sospechoso del crimen a Hao Gu, arquitecto de software, de 46 años y cuyo cuerpo fue hallado en un vehículo a menos de doscientos metros de la casa de la Bing Liu, el profesor e investigador.
Gu, supuestamente después de dispararle a Bing en la cabeza, cuello, torso y una extremidad, salió de la vivienda y se suicidó en su coche.
“No hemos encontrado evidencia de que este trágico evento tenga algo que ver con su empleo en la Universidad de Pittsburgh, cualquier trabajo que se realice en la Universidad de Pittsburgh y la actual crisis de salud que afecta a los Estados Unidos y al mundo”, dijo en un comunicado el sargento Brian Kohlhepp.
Sin ofrecer detalles sobre la relación, atribuyó el crimen a una “longeva disputa” personal de ambos, según publican medios estadounidenses.
Explica que el sábado, cuando ocurrió el crimen, alrededor de las doce de la mañana, el investigador tenía abiertas las puertas delantera y trasera de su domicilio por el buen tiempo, su mujer no estaba en casa y Gu entró sin encontrar ningún impedimento y le disparó en la cabeza, cuello, torso y una extremidad.
“Hay cero evidencia” que relacione el asesinato de Bing con su investigación sobre el COVID-19, dice Kohlhepp.
El cadáver de Bing fue encontrado por su esposa.
“Bing estaba a punto de hacer hallazgos muy significativos para comprender los mecanismos celulares que subyacen a la infección por SARS-CoV-2 y la base celular de las complicaciones siguientes”, aseguró Ivet Bahar, jefe del departamento de biología computacional y de sistema en la Facultad de Medicina de Pittsburgh.
Sus investigaciones
Según su página web, la área de investigación de Bing Liu se centra en la biología de sistemas computacionales.
“Desarrollo técnicas de modelado computacional, simulación y análisis para estudiar la dinámica de los sistemas biológicos. Como parte integral de mi investigación, colaboro con varios biólogos y clínicos para estudiar una variedad de procesos biológicos cruciales relacionados con la inmunidad humana y el cáncer”, describe.
Las cuatro publicaciones que ha hecho en este año no tienen nada que ver con el coronavirus, lo que da a entender que es uno de los miles de biólogos computacionales que trabajan intensamente para comprender el sistema de infección del COVID-19. Era coautor de 30 investigaciones publicadas.
Bing, de 37 años, obtuvo su doctorado en la Universidad de Singapur en el 2012. A su llegada a Estados Unidos, trabajó como becario tras el doctorado en la Universidad de Carnegie Mellon con el renombrado científico informático Edmund M. Clarke, ganador del Premio Turing en 2007.
Tenía seis años en el laboratorio de Pittsburgh.
Bahar afirmó a los medios que Liu “estaba empezando a obtener resultados interesantes”.