Los vinculados a la Operación Falcón que permanecen prófugos
Las autoridades recomiendan al grupo no evadir el proceso y entregarse
A siete días de que las autoridades desmantelaran, bajo la Operación Falcón, una alegada red dedicada al tráfico internacional de drogas y lavado de activos, seis integrantes del entramado criminal permanecen prófugos de la justicia.
Se trata de Erick Randhiel Mosquea Polanco, supuesto cabecilla, y sus hermanos Harington José Mosquea Núñez y Claritza Andreina Mosquea Eduardo. Además, Juan Carlos Mosquea Eduardo, Kelvin Alexander Torres Bueno, Osiris Medina Díaz, así como de los hermanos Alberto de Jesús Polanco y Alberto Enmanuel de Jesús Polanco, a quienes las autoridades exhortan no evadir el proceso y entregarse.
De acuerdo con una fuente, los prófugos son individuos violentos y muy peligrosos, que andan con armas de distintos calibres.
Al grupo, buscado activamente por unidades élites y de reacción de agencias de inteligencia del Estado, se le recomienda no resistirse al arresto.
Sobre los prófugos, las autoridades han informado que Erick Randhiel Mosquea Polanco es uno de los cabecillas de la red. Mosquea Polanco está acusado de haber “montado un esquema de operación sin precedentes”, que lo ha convertido en un poderoso y temido narcotraficante internacional y que junto a sus ejes operativos dentro de la organización liderada por Juan José de la Cruz Morales (Wandy), en la zona este del país, ha traficado desde Colombia, a través de la República Dominicana, miles de kilos de cocaína hacia Puerto Rico, Estados Unidos y Europa.
La red vinculada a megas operaciones de narcotráfico tenía como centro de mando, control y lavado de activos la provincia de Santiago de los Caballeros, sostiene el Ministerio Público.
El expediente establece que Erick Randhiel Mosquea Polanco, nacido y residente en la ciudad de Santiago de los Caballeros, “una vez recibe en suelo dominicano el dinero fruto de las operaciones de narcotráfico transnacional en coordinación con el investigado Juan José de la Cruz Morales, cuenta con un equipo de colaboradores, en su mayoría familiares, que son quienes se encargan de invertir en bienes muebles e inmuebles y empresas para ingresar ese dinero en el sistema financiero dominicano”.
Otro de los prófugos es Juan Carlos Mosquea Eduardo, hermano de Erick Randhiel. Su función principal, conforme la acusación, es prestar su nombre para la compra de propiedades y administrar las empresas del reconocido narcotraficante.
También se encuentra evadiendo la justicia Kelvin Alexander Torres Buena (El Toro), quien es primo hermano de Erick Randhiel Mosquea Polanco. Las autoridades lo sindican como la persona que se encargaba de invertir en propiedades y negocios formalmente constituidos con la finalidad de darle apariencia legal al dinero recibido producto del narcotráfico, en clara operación de lavado de activos.
Las autoridades también persiguen a Alberto De Jesús Polanco (El Prieto y/o Many), socio y testaferro de Erick Randhiel Mosquea Polanco.
Hasta el momento, a la red de lavado de activos se le ocuparon unos 130 vehículos, incluyendo tres blindados, así como una embarcación pequeña y una grande. También, alrededor de 4.9 millones de dólares en efectivo y más de 22.7 millones de pesos.
También, costosos relojes de lujo, decenas de inmuebles, siete estaciones de combustibles y varias fincas, incluyendo una de banano.