Envían a prisión administrador de Moscoso Puello por muerte de dirigente del PRM
Gelpi Polanco está vinculado a la muerte de Julio Pérez Valdez en las cercanías de un centro de votación
La Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional le impuso tres meses de prisión preventiva a Gelpi Polanco Gómez, administrador del Hospital Francisco Moscoso Puello, vinculado con la muerte a tiros de un dirigente del Partido Revolucionario Moderno (PRM) durante las elecciones del 5 de julio.
El tribunal dispuso que Gelpi Polanco fuera enviado a la Penitenciaría Nacional La Victoria mientras concluyen las investigaciones del hecho en el que murió Julio Pérez Valdez y resultaron heridas tres personas más. El hecho ocurrió en los alrededores de un politécnico del sector Simón Bolívar.
Fiscalía pide cárcel para el administrador de hospital por muerte de dirigente del PRM
De manera preliminar, el Ministerio Público califica los hechos por los que sometieron al imputado como asociación de malhechores para cometer homicidio, la tentativa de asesinato y el uso ilegal de arma de fuego.
El expediente establece que el imputado en asociación con su seguridad, el prófugo Andy Sánchez Doñé, para cometer el crimen.
Conforme a las investigaciones realizadas por la Fiscalía del Distrito Nacional, a través de su Departamento de Crímenes y Delitos contra la Persona, el móvil del suceso fue un conflicto que se produjo entre el imputado Polanco Gómez y la víctima Jean Luis González por presunto compra de votos.
Se informó que unas semanas antes de lo ocurrido, el detenido acordó con González que enviara su gente a votar para luego pagarle a cada uno de ellos por el sufragio, pero cuando el herido reclamó el dinero, el agresor se negó a pagarle.
Fue bajo esas circunstancias, indica el expediente, que el imputado empujó a González, indicándole a su seguridad que les dispararan, procediendo el prófugo Sánchez Doñé a tomar su arma de fuego con la que realizó aproximadamente 19 disparos de manera indiscriminada, en dirección hacia donde estaba el señor González Díaz, mientras con la otra mano tomó al encartado y se lo llevó del lugar, para emprender inmediatamente la huida.