Cárcel de La Victoria: se inicia el fin del oprobio
Primera etapa será inaugurada hoy por Danilo Medina y Jean Rodríguez
Lo que se suponía un ideal, un sueño, parece que se hará realidad. La Victoria, el centro penitenciario más poblado de la República Dominicana y el más cuestionado por la forma en que viven los privados de libertad y las cosas que estos deben hacer para sobrevivir, dejaría de ser una vergüenza y se convertiría en un espacio digno para quienes son o fueron parte de un proceso judicial.
Este lunes el presidente de la República, Danilo Medina y el procurador general, Jean Alain Rodríguez, inaugurarán la primera fase del proyecto denominado La Nueva Victoria y con él, dejan establecido el comienzo de lo que sería el fin del oprobio dominicano.
Aunque los fondos para su construcción provienen del escándalo de corrupción más grande de República Dominicana: caso Odebrecht, no cabe duda de que la inversión hecha por la Procuraduría en el marco del programa de humanización de los recintos penitenciarios será valorada por la población.
Hacinamiento
El hacinamiento en La Victoria motivó a que la artista dominicana Sofía Torres Prida realizara una exposición fotográfica en el año 2014, bautizándola como “La victoria, casa de Dios donde predica el diablo”. En su trabajo describe diferentes momentos de un mundo donde se conjugan diversas culturas y creencias, enmarcadas en un ambiente hostil, donde el hacinamiento y el ocio se convierten en los principales protagonistas de una realidad que vulnera derechos fundamentales.
Pero el hacinamiento no es lo único que caracteriza ese lugar. No. La Victoria es el destino favorito de los privados de libertad vinculados a criminalidad organizada, tanto por preferencia de los imputados como por decisión de jueces y fiscales.
Las razones, según denunció el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Manuel María Mercedes en el año 2014, tienen su origen en que una persona con poder adquisitivo paga hasta tres millones de pesos semanales por concepto de alojamiento en celdas, comida, bebidas y uso de los sanitarios.
Allí hay varios pabellones; uno de ellos es Alaska. Una “suite” en Alaska puede costar hasta RD$300 mil, y quien lo pague puede acceder a unos lujos que van desde gimnasio hasta masajes corporales, según un informe emitido en 2016 por Derechos Humanos.
Lo opuesto de Alaska es La Planchita, el pabellón más arrabalizado y donde llegan todos los reos de nuevo ingreso. Para moverse a un área más o menos cómoda, deben pagar desde RD$500 hasta RD$30 mil para conseguir una celda con cama. Los Galopes es el área intermedia.
¿Cuándo se construyó La Victoria?
La historia de la Penitenciaría Nacional de La Victoria tiene algunas similitudes con la que será inaugurada este lunes por el presidente Danilo Medina y el procurador general de la República, Jean Alain Rodríguez.
Ambas fueron inauguradas en el mismo mes; la vieja un 16 de agosto del 1952 y la Nueva Victoria el 10 de agosto el presente año.
Pero eso no es todo, basado en la publicación del periódico El Caribe del 17 de agosto de 1952, el historiador y profesor de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Alejandro Paulino Ramos, establece que la construcción de La Victoria fue promovida en ese entonces como un “nuevo paso de avance en las conquistas sociales logradas por el presidente Trujillo” que venía a revolucionar el sistema carcelario nacional.
A la vez de disimular la represión política contra los opositores, y para ponerle fin a la existencia de la cárcel de la Fortaleza Ozama.