Investigan unos 86 colmados por fraude con las tarjetas de Supérate
Adess ha suspendido a por lo menos el 10 % de los negocios afiliados al RAS por fraude
Además de los representantes de seis colmados que han sido sometidos a la justicia por presunto fraude al programa gubernamental de auxilio social Supérate, otros 80 establecimientos están siendo investigados por la comisión de delitos similares.
En total son 86 los establecimientos a los que la Administradora de Subsidios Sociales (Adess) está investigando por la comisión y /o tentativa de fraude mediante la clonación de tarjetas electromagnéticas con los que los beneficiarios del programa, en su mayoría adultos mayores, reciben transferencia monetaria como subsidio.
Sin embargo, la comisión o tentativa de fraude ha llevado a la Adess a suspender unos 300 colmados, más del 10 % de los que integran la Red de Abastecimiento Social (RAS) para el uso de las tarjetas de Supérate, según informó la entidad.
De acuerdo con la consultora jurídica de Adess, Solange Rodríguez, ya han presentado denuncias formales contra 56 colmados por esos delitos que suman más de 300 millones de pesos en menos de dos años.
Más de 100 millones corresponden al fraude realizado en febrero que afectó a unos 30,000 beneficiarios y por el que al menos a seis personas se le solicitó medida de coerción por parte de la Fiscalía de Santo Domingo Este.
Solo en ese caso se calculan transacciones por orden de los 14 millones de pesos, realizadas entre el 18 y 20 de febrero, algunas de ellas en horas de la madrugada, pese a los acuerdos arribados con las instituciones de intermediación financiera para no aprobar las mismas entre las 10:00 de la noche y las 6:00 de la mañana.
A la fecha, los que han sido sometidos suman 40 personas, entre dueños de colmados y a los clonadores de tarjetas, en su mayoría jóvenes de clase media de distintas partes del país.
Las investigaciones, que se denominan como el caso Solidaridad 3.0, datan desde principio de 2020, cuando la entonces vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño, alertó sobre fraude con la tarjeta Progresando con Solidaridad (hoy Supérate).
Los casos involucran a siete comercios de Santo Domingo, dos de Santiago, dos de Barahona, uno de Puerto Plata, uno de San Pedro de Macorís y uno de San Juan.
El coordinador del Gabinete de Políticas Sociales de la Presidencia de la República, Francisco (Tony) Peña Guaba,informó que los fraudes se han estado produciendo tanto en el programa Solidaridad con tarjetas, como con el esquema de uso de cédula que se estableció a raíz de la pandemia del COVID-19 para la ayuda social denominada Quédate en Casa.
Ante lo vulnerable que dijo resultó este último, han recomendado ir cambiando el sistema de acceso al subsidio mediante cédula, para aminorar los robos.
Además, están iniciando un proceso de cambio de las tarjetas de bandas por las de chip a los más de un millón de beneficiarios, indicó. El cambio podría prolongarse por todo el año 2022, pero mientras tanto estarán trabajando con todos los órganos de seguridad estatales y la Procuraduría General de la República, para endurecer la vigilancia y control de fraude.
Coerción
Contra 26 de los sometidos por el fraude a Supérate pesa alguna medida de coerción que, aunque inicialmente fue de prisión preventiva por tres meses, han ido variando al uso de grilletes electrónicos y garantía económica.
Ayer, la directora general de Adess, Digna Reynoso, clamó por un mayor compromiso de parte de los actores del sistema de justicia para que acepten las pruebas que se presentan en los tribunales, ya que muchas veces los casos se caen por la dificultad del ministerio público de llevar a los afectados a la audiencia.
Reynoso recordó que las víctimas directas del fraude son los beneficiarios de las tarjetas, en su mayoría adultos mayores, a quienes se les dificulta para ir a un tribunal de manera presencial.
Devolución de dinero
La funcionaria insistió también en la necesidad de que las personas que se sientan estafadas vayan a presentar la denuncia, pues una vez se logra establecer la veracidad del fraude y recuperado el dinero, este se le devuelve a los afectados.
La directora de Adess dijo que en la actualidad se han devuelto unos 18 millones de pesos tras llegar a acuerdos con los negocios involucrados en las acciones fraudulentas.
Ha logrado recuperar Adess mediante acuerdo con los negocios involucrados en fraudes.
Policía Nacional dice continúa con las investigaciones
El vocero de la Policía Nacional, Diego Pesqueira, advirtió que desde la uniformada no descansarán hasta tanto no ubiquen, apresen y sometan a la justicia a todos los culpables involucrados en el entramado criminal de estafa al programa social Supérate.
Aseguró que continúan los procesos investigativos en conjunto con Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología y las autoridades del Ministerio Público.
Seis personas fueron sometidas a la justicia por la clonación de tarjetas de las ayudas sociales del programa Supérate, luego de que el Ministerio Público encontrara evidencias de que, en tan solo un fin de semana, del 18 al 20 de febrero de este año, el grupo habría sustraído más de RD$14 millones de los fondos de estos subsidios gubernamentales.
A los seis imputados se le atribuye de manera preliminar, haber realizado al menos 8,659 transacciones que, de manera precisa, suman 14.2 millones de pesos.
Hasta el momento, los primeros seis que están bajo el control del Ministerio Público son los imputados Ydalis Maribel López, Yanilda Altagracia Rodríguez Herrera, Jonathan Martínez, Juana Felicia Guillén, Odalia Florentino, y Bernaldo Santiago Hernández Concepción, todos propietarios de los negocios (almacenes y colmados) que fueron allanados el pasado fin de semana en Santo Domingo Norte, donde se ocuparon decenas de evidencias que los vinculan al fraude.
Los fiscales están solicitando que a estas personas se le imponga prisión preventiva, bajo el argumento de que las tarjetas Supérate pertenecen a personas vulnerables y envejecientes que necesitan esos fondos para costear sus alimentos y medicamentos.Las transacciones con las tarjetas clonadas eran realizadas en lugares desconocidos por los beneficiarios de los subsidios, pero, además, se ejecutaban en horarios no habituales.