Incendio en Letonia deja ocho muertos: varios extranjeros
HELSINKI, Finlandia (AP) — Ocho personas, algunos de ellos ciudadanos extranjeros, murieron la madrugada del miércoles por un incendio en un edificio que acogía un hostal aparentemente ilegal en el centro de la capital de Letonia.
Bomberos y rescatistas dijeron haber recibido un aviso para acudir a la calle Merkela, en el corazón de Riga, alrededor de las 5 de la mañana.
La sexta planta del edificio y el tejado estaban en llamas y los rescatistas encontraron ocho personas muertas. Evacuaron a otras 24 del lugar, según la agencia de noticias Baltic News Service.
La televisora estatal lituana emitió imágenes de llamas saliendo de la parte superior del edificio, varios camiones de bomberos y una escalera extendida desde la que dos bomberos dirigían un chorro de agua hacia el fuego.
El edificio, de propiedad estatal, parecía alojar un hostal ilegal, según las autoridades. Los gestores del establecimiento habían hecho poco antes una reforma sin licencia.
Algunas de las víctimas eran extranjeras, afirmó Martins Stakis, alcalde de Riga. El edificio se encuentra en el centro de Riga, cerca de las principales estaciones de autobús y tren de la ciudad.
La causa o el lugar exacto donde comenzó el incendio no estaban claros en un primer momento, aunque las autoridades dijeron que las pesquisas se centraban en el hostal porque en teoría el inmueble era un apartamento privado, pero se estaba utilizando como hostal sin los permisos necesarios, incluido el de seguridad contra incendios.
Stakis dijo en Twitter que, según la información que había recibido de la policía, el establecimiento funcionaba de forma ilegal y “el edificio quemado estaba lleno de extranjeros, probablemente estudiantes extranjeros, que utilizaban los servicios del hostal”.
El sitio web del hostal, llamado “Japanese Style Centrum Riga”, mostraba su dirección como apartamento 21 de la calle Merkela. Decía tener 22 habitaciones.
Según la cadena pública letona LSM, la policía y los bomberos tenían fichado el lugar por preocupaciones sobre seguridad contra incendios y porque el establecimiento no cumplía las restricciones contra el COVID-19.
Martins Baltmanis, subdirector del cuerpo de bomberos y rescates, informó que su oficina había recibido avisos de otros residentes en el edificio sobre posibles obras arbitrarias en el inmueble.