Diez millones de rusos votaron en primera jornada plebiscito constitucional
Moscú, 26 jun (EFE).- Más de 10 millones de rusos votaron en la primera jornada del plebiscito constitucional que concluirá el 1 de julio y del que depende que el presidente ruso, Vladímir Putin, pueda presentarse a la reelección en 2024.
Según informó Ella Pamfílova, la presidenta de la Comisión Electoral Central (CEC), en total un 9,2 % del electorado ejerció su derecho al sufragio el jueves.
Los rusos pueden votar por adelantado en los colegios electorales, por correo o por internet (sólo los residentes de Moscú y de Nizhni Nóvgorod).
La prensa informa de que varios activistas y periodistas comprobaron por sí mismos que se puede votar por internet y, al mismo tiempo, acudir a depositar la papeleta en una urna en un colegio electoral.
Al respecto, Pamfílova criticó a los 'provocadores' que intentan votar más de una vez y aseguró que dichos votos serán anulados por el sistema, aunque no inmediatamente.
También hubo denuncias sobre la instalación de urnas en maleteros de coches, en plena calle o en patios residenciales.
Pamfílova llamó a los dirigentes regionales a supervisar escrupulosamente la votación y les recordó las palabras de Putin de que para el Kremlin es 'sumamente importante' que 'los resultados de la votación nacional sean absolutamente fidedignos y legítimos'.
'No podemos permitir que se obligue a votar y se manipulen las cifras de participación, no digo ya irregularidades, durante el escrutinio, de forma que nadie pueda poner nunca en duda la postura que adopten los ciudadanos', apuntó Putin el jueves.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, advirtió de que el número de noticias falsas se ha disparado en las últimas horas y que la presidencia sólo se tomará en serio aquellas denuncias que incluyan pruebas concretas de las irregularidades.
En la misma línea se manifestó hoy el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, muy criticado hace un año cuando la comisión electoral local no permitió registrar sus candidaturas a los candidatos opositores, lo que provocó las mayores protestas antigubernamentales desde 2012.
'Mi postura de principio es que la gente debe votar libremente. Nadie debe obligarles y a quién lo haga, le daremos una reprimenda', dijo.
Aparte de la inclusión de Dios, el matrimonio heterosexual y el salario mínimo en la Constitución, el plebiscito es en realidad un referéndum sobre si los rusos quieren que Putin pueda presentarse a la reelección en 2024 y en 2030, algo que le impide la actual Carta Magna, que limita a dos los mandatos presidenciales consecutivos.
'¿Aprueba usted los cambios a la Constitución de la Federación Rusa?', es la pregunta a la que deben responder los votantes.
Según los sondeos oficialistas, más de dos tercios de los rusos apoyan la reforma constitucional, aunque, según el independiente Centro Levada, la diferencia es de 44 % contra 33 %. EFE