Exigencia de tarjeta COVID-19 arranca con demandas ante TSA y flexibilización
El TSA conoce hoy los recursos de amparo que buscan dejar sin efecto la medida de salud
La resolución 000048 del Ministerio de Salud Pública que impone la presentación de la tarjeta de vacunación contra el COVID-19 para acceder a establecimientos públicos empezó a aplicarse ayer con flexibilidad para aquellos que todavía no se han inoculado y en medio de un litigio en los tribunales que busca que se declare la nulidad de la medida.
Los recursos, que ponen en causa a la Presidencia de la República, el Ministerio de Salud Pública y su ministro Daniel Rivera, están en el Tribunal Superior Administrativo (TSA), que hoy conocerá una solicitud de amparo interpuesta por Yancarlos Martínez Segura y Eli Saúl Barbi Castro.
Ambos plantean que la resolución se constituye en una seria amenaza a los derechos fundamentales de la colectividad, como son el libre tránsito, el derecho a la igualdad, a la libertad, entre otros derechos fundamentales.
Ayer los abogados tuvieron un primer intento fallido en sus intenciones legales, puesto que, por un error procesal, no le fue acogida una solicitud de medida cautelar ante la Cámara Civil y Comercial del Distrito Nacional, para que la aplicación de la resolución quedara suspendida mientras el TSA fallaba los recursos de nulidad.
Otra de las acciones que el tribunal conocerá hoy contra la resolución de Salud Pública fue interpuesta por el pastor y dirigente político Carlos Peña, quien también persigue la anulación de la disposición gubernamental.
En lo que se decide la suerte de esos recursos, en las plazas comerciales, bancos, Metro de Santo Domingo y el transporte público y privado se observó ayer a personal requiriendo a cada usuario o visitante presentar su tarjeta, pero también permitir la entrada a quienes no disponían de ella, con la sola advertencia de que al día siguiente no le darían tal oportunidad.
En algunas ocasiones también se les indicaba pasar a los centros de vacunación que, como en los casos de las plazas o de algunas paradas de autobuses, se encuentran dentro de sus instalaciones.
Muchos acogieron la sugerencia y repletaron la mayoría de los centros que ayer, como ocurrió desde que anunciaron la resolución, han experimentado un incremento considerable de los que acuden a vacunarse.
Un chance
Ayer, el ministro de Salud Pública, Daniel Riviera, resaltó el que 405,000 personas se han vacunado en la última semana, cifra que, aseguró, duplica la cantidad de los que se estaban vacunando con la primera dosis previo a la resolución emitida el pasado 8 de octubre.
Al mismo tiempo, justificó la flexibilidad para los que aún no se vacunan.
“Iremos mejorando y tenemos que ser flexibles, porque no es estado de sitio...si la gente se le olvidó la tarjeta, pues que entre, lo que queremos es que aquellos que no se han vacunado, y ahí lo importante (...), entendemos que tenemos que ser flexible, darle un chance a la gente”.
El ministro agradeció el respaldo de la población que, dijo, ha entendido que lo que buscan las autoridades de salud es que todos se vacunen y se logre el 70 % de la población inoculada para lograr la inmunidad del rebaño contra la enfermedad que, a la fecha ha provocado la muerte de 4,090 personas y contagiado a 371,447 en todo el territorio.
Hasta el domingo suman 6, 304,282 los que se han aplicado la primera dosis en el país y 5,088,396 los que tienen segunda dosis.
En la plaza comercial Ágora Mall, la ciudadana Claudia Preval era de las que con formulario en manos, esperaba por su primera dosis. Ella no había querido vacunarse por temor a que sus complicaciones de salud se agravasen con la vacuna, pero ante la advertencia de que no podía entrar al Metro, decidió vacunarse.
Como ella, decenas esperaban en el centro para inocularse. Al mediodía ya llevaban más de 170 personas vacunas, la mayoría (79) de primera dosis.
También el Sambil, Paola Esrra se quejaba de lo lento que estaban los vacunadores. Ella formaba parte de los que decidieron no vacunarse, pero este lunes acudió a una institución pública donde le negaron la entrada por no estar vacunada.
Xiomara Medina, encargada del centro de vacunación de Sambil declaró que estaban bastante ajetreados, pues están teniendo más de 240 personas por día desde el pasado 8 de octubre.
En el transporte
La exigencia del Ministerio de Salud Pública fue parcial en el transporte de pasajeros. En casi todas las estaciones del Metro y el Teleférico se exigió la tarjeta, pero hubo flexibilidad con algunos usuarios, con la salvedad, no obstante, de que deben vacunarse o de lo contrario no abordarían el sistema en otra oportunidad.
En las terminales de autobuses del servicio privado la exigencia se cumplía a media, excepto en Caribe Tours donde cada pasajero que esperaba abordar una unidad debía tener la tarjeta consigo. Los que no tenían el documento, podían vacunarse en un centro instalado en la terminal.
Francisco Marmolejo, gerente de operaciones de la empresa, dijo que la mayoría de los pasajeros lleva su tarjeta.
En la terminal del kilómetro 9 de la autopista Duarte, algunos de los autobuses subían pasajeros sin reclamar el documento, mientras lo exigían a otros. En la boletería le solicitaban la tarjeta para venderle un ticket, pero a muchos se les vendía el boleto como de costumbre.
Valentín Taveras, un operador de rutas del kilómetro 9, dijo que como fue el primer día ha habido flexibilidad con algunos pasajeros, pero que al menos siete personas se les impidió transportarse porque no tenían la tarjeta.
Igual ocurría en otras terminales como las del Sur y del Este. Llamó la atención que en ninguna de las partes recorridas había fiscalizadores, ninguna autoridad oficial reclamaba el documento.
Las rutas de carros de concho trabajaron, en su mayoría, sin exigir la tarjeta. Muy pocos choferes la reclamaban, según se observó, y al contrario, ya muchos volvieron a montar seis pasajeros en violación a los protocolos de las autoridades y a la Ley 63-17 que establece que solo se puede montar un pasajero adelante y tres atrás
Hay 15,800 profesores que aún no se vacunan
Hay 15,800 maestros del sistema educativo público dominicano que no se han vacunado contra el COVID-19, de un total de 106,828 que están en la nómina del Ministerio de Educación, de acuerdo a datos suministrados por la institución.
El informe contrasta con los ofrecidos por los ministros de Salud Pública y Educación que aseguraron que el 98% del personal docente ya estaba vacunado.
La información suministrada a través de la Oficina de Libre Acceso a la Información Pública del Minerd da cuenta de que el 85.2% de los maestros está vacunado, restando por hacerlo un 14.8%. Del personal administrativo se dijo que está vacunado el 85.1% y del sector privado un 85.7% del personal docente y un 85.9% del administrativo está inoculado.
Sin embargo, el documento del Ministerio de Educación no reporta con cuántas dosis de la vacuna fueron inoculados los maestros, y remite a la página de Vacúnate RD.
Ayer el Ministro de Salud Pública destacó que las escuelas están siendo más seguras que las calles respecto al contagio.
“Los estudios que tenemos constantes han demostrado que la positividad en las escuelas es de 1.2 a 1.9, sin embargo, ustedes han visto que la positividad en las calles es de 10 o de 9.” Indicó que los profesores tienen que moverse entre la vida adulta y los niños.
Esta nota la elaboró un equipo de DLconformado por Tania Molina, Adalberto de la Rosa, Wander Santana, Socorro Arias, Patricia Heredia y Andreína Chalas.