El país marcha este domingo contra la violencia hacia la mujer
Realizan movilizaciones en distintos puntos
Piden ley elimine violencia de género
SANTO DOMINGO. Miles de personas marcharon este domingo 25 de noviembre en diferentes partes del país para reclamar al Congreso Nacional una ley integral para frenar la violencia contra las mujeres y una estrategia para la erradicación del matrimonio infantil en todos los casos.
“La ciudadanía tiene los ojos puestos sobre nuestras diputadas y diputados quienes tienen el deber de legislar para evitar más muertes y agresiones a las mujeres en República Dominicana. La falta de acción es también complicidad” advirtió la Coalición por la Vida y los Derechos de las Mujeres en un comunicado.
En la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, el colectivo llamó al Estado y a toda la sociedad a tomar acción para poner fin a todas las formas de violencia contra las niñas y mujeres, garantizando el respeto pleno de sus derechos.
“Nos levantamos contra el acoso callejero, la violencia familiar, la violencia sexual, el hostigamiento y el acoso sexual laboral; y exigimos políticas preventivas para detener la violencia, al igual que recursos suficientes del Presupuesto Nacional para la debida atención a las víctimas y a sus hijos e hijas” señaló en la proclama leída en el acto de clausura de la actividad.
La marcha partió desde la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) hasta llegar al frente del Congreso Nacional donde se concentraron y entregaron un documento a varios legisladores que prestaron su apoyo, entre ellos el senador por la provincia de Samaná, Prim Pujals.
También en Villa Mella las mujeres marcharon por el cese de la violencia contra y demandando más igualdad.
En tanto que otro grupo de mujeres se presentó con pancartas en manos en la avenida Abraham Lincoln mostrando mensajes alusivos a la violencia de género.
En Salcedo
Con diversos actos recordaron en este municipio aquí a las hermanas Mirabal y a Rufino de la Cruz, asesinados el 25 de noviembre del 1960, por órdenes del dictador Rafael Leónidas Trujillo Molina.
Las actividades iniciaron con una misa en la parroquia San Juan Bautista, de Salcedo, oficiada por monseñor Jesús María de Jesús Moya, obispo emérito de la Diócesis de la provincia Duarte.
Durante la eucaristía, el prelado católico resaltó el legado dejado por las también conocidas como las Mariposas a favor de la libertad en República Dominicana.
Dijo que ese crimen unificó la sociedad dominicana para derrocar la tiranía trujillista.
Terminado el acto religioso, se llevó una ofrenda floral en el Museo de las hermanas Mirabal, ubicado en la comunidad Conuco, de este municipio.
Las palabras de bienvenida a esta actividad estuvieron a cargo de la alcaldesa de Salcedo, María Ortiz, quien resaltó que el 25 de noviembre es una fecha para renovar el compromiso colectivo de construir una cultura de paz, "donde podamos erradicar todo tipo de violencia".
Mientras que Manolo Tavárez Mirabal, hijo de Manolo Tavárez Justo y Minerva Mirabal, agradeció al pueblo dominicano por mantener viva las memorias de su madre y tías a 58 años de ese horrendo crimen.
Patria, Minerva y María Teresa Mirabal fueron asesinadas el 25 de noviembre del 1960. Sus cuerpos fueron localizados destrozados en el fondo de un barranco en el interior de un jeep junto al de Rufino de la Cruz, quien conducía el vehículo.
El hecho se produjo a menos de dos kilómetros de la salida de Puerto Plata, cuando las luchadoras antitrujillistas regresaban de visitar a sus esposos en la cárcel San Felipe de esa ciudad.
Ese crimen motivó que la Organización de Naciones Unidas (ONU) instituyera el 25 de noviembre como Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
"Que las hermanas Mirabal sean un símbolo de la lucha por la no violencia contra la mujer es una grandeza histórica para la República Dominicana y, sobre todo, para este pueblo de Salcedo", resaltó Jaime David Fernández Mirabal, sobrino de las mártires de la tiranía trujillista.
En los actos participaron las autoridades civiles de la provincia Hermanas Mirabal, así como las embajadoras en el país de los Países Bajos y Canadá, Annemieke Verrijp y Shauna Hemingway, respectivamente.