Residentes en La Ureña claman a ASDE la culminación de aceras y contenes
Los ingenieros abandonaron la obra por falta de pagos mientras la angustia y las dificultades aumenta en la comunidad, que también reclaman a Obras Públicas el asfalto de las calles
Los vecinos del residencial Paraíso, ubicado en la calle respaldo Los Jardines, en el kilómetro 18 de la autopista Las Américas, enfrentan una situación desesperante.
Desde hace unos de seis meses, esperan la culminación de la construcción de aceras y contenes en su comunidad, un proceso que se encuentra paralizado por falta de pago del Ayuntamiento de Santo Domingo Este (ASDE), según explicaron a Diario Libre.
Los vecinos, frustrados por la inacción, pidieron al alcalde Dío Astacio que intervenga para garantizar los pagos necesarios y permitir que la obra se complete.
Además, hicieron un llamamiento al ministro de Obras Públicas, Deligne Ascensión, para que responda a un llamado mediante una comunicación llevada a su despacho el 25 de marzo del 2022 y firmada por las tres principales juntas de vecinos del sector, (El Progreso, El Buen Pastor y Estrella del Oriente), en la que se solicitaba el asfalto de las vías de la zona, el acuse de recibo de la carta recibida en obras públicas el 26 de abril del 2022, fue mostrada a reporteros de este medio.
En tanto que, en diciembre de 2023, los residentes habían sentido un rayo de esperanza al enterarse de que otra solicitud había sido aceptada por el ASDE, pero esa emoción fue efímera, pues aún no han finalizado los pocos metros cuadrados de la obra.
"Pedimos encarecidamente a las autoridades correspondientes que tomen carta en el asunto", manifestaron los comunitarios, quienes han sido informados de que los trabajos se detuvieron tras las elecciones debido a problemas de financiamiento.
Los testimonios son conmovedores. Michael Peralta, uno de los residentes, relató cómo, tras la paralización de los trabajos, tuvo que pagar a un particular para poder acceder a su hogar con su vehículo.
Por su parte, Marcelino Mateo comentó que tuvo que invertir en tres camiones de relleno para habilitar la entrada de su casa, mientras que la guagua de transporte público ya no puede ingresar al sector por la acumulación de materiales.
La situación afecta incluso a familias con bebés, como la familia Hernández, quienes deben lidiar con el polvo y las molestias generadas por la obra inconclusa. Además, el tránsito a pie se ha vuelto complicado, con lodo acumulado que dificulta el paso de estudiantes que deben atravesar la zona para llegar al liceo La Ureña.
Los residentes del residencial Paraíso continúan esperando que se escuchen sus voces y que se finalicen las obras esenciales para mejorar la calidad de vida en su comunidad.